El grupo que promueve el complejo comercial de Paterna, Puerto Mediterráneo, se ha cansado de esperar la nueva figura urbanística que prepara la Generalitat para tramitar grandes proyectos y se ha decidido a poner en marcha ya la vía municipal para retomar esta controvertida iniciativa de inversión.
Tal como ha trasladado la Conselleria de Obras Públicas casi desde el día después al rechazo al proyecto, en septiembre de 2016, la única alternativa que le quedaba al operador británico Intu era empezar la tramitación desde cero, como si de un proyecto nuevo se tratase.
En este contexto, las opciones son dos: la primera es esperar a que la conselleria defina la figura de Proyectos de Inversiones Estratégicas Sostenibles (PIES). Se trata de la nueva vía que va a crear la Generalitat en sustitución de la Actuación Territorial Estratégica (ATE), un mecanismo diseñado por el Consell del PP para agilizar la tramitación de los grandes proyectos y desplegarlos en un año, pero que en la práctica no evitó que Puerto Mediterráneo tuviera un recorrido administrativo de un lustro.
El PIES, que estará incluido en la futura Ley de Ordenación del Territorio, Urbanismo y Paisaje de la Comunitat Valenciana (LOTUP), es sin embargo un escenario incierto en estos momentos. No se sabe cuánto puede tardar en estar listo.
Así las cosas, el grupo IntuEurofund está decidido a trabajar ya en la modificación del plan general de ordenación urbana de Paterna, una vía que puede agilizar el procedimiento. A ella se acogió, por ejemplo, Inditex para ampliar las instalaciones de su empresa participada en Elx, Tempe.
Según apuntan fuentes conocedoras del proceso, el grupo británico no puede esperar más. De hecho, en el último año y medio, casi desde el mismo «no» al proyecto de la Comisión de Evaluación Ambiental de la Generalitat, el gigante británico de los centros comerciales, aliado con el fondo español Eurofund, ha seguido moviéndose.
Al tiempo que se recurría al Tribunal Superior de Justicia el rechazo de la Conselleria de Obras Públicas, el promotor ha tratado de retomar los contactos políticos. Fruto de ello, el embajador de Reino Unido ha mediado recientemente frente al jefe del Consell. Hoy por hoy, Intu es el primer inversor británico en España. Aunque la posición de la administración sigue siendo la misma, los contactos han permitido al menos romper el hielo entre Generalitat e inversor.
En paralelo, Intu ha trabajado en adaptar el macrocentro al plan Actua, el documento del Ayuntamiento de Paterna que fija las líneas maestras del crecimiento de la ciudad para las próximas décadas. Básicamente, le ha dado al proyecto una vertiente más sostenible desde el punto de vista energético, de movilidad y con una mayor huella verde.
Con todo, el cambio fundamental es la decisión de reducir el tamaño de la superficie. Y es que la Generalitat se mantiene firme en su posición de que Puerto Mediterráneo debe dejar libre una franja de terreno de cien metros hasta la cercana carretera CV-35. Cabe recordar que la inversión, aún tomando la vía municipal, debe obtener el visto bueno de la comisión de evaluación ambiental de la conselleria. Y esta lo rechazó, precisamente, por el informe negativo de Carreteras al solo dejar 50 metros hasta la CV-35.
Desde el Ayuntamiento de Paterna se da por hecho que la modificación del plan parcial contará con los votos necesarios para salir adelante. Aunque recientemente una moción de apoyo a Puerto Medi-
terráneo en el consistorio generó aún más incertidumbre después de que Compromís, Paterna Sí Puede, EU y también Ciudadanos la tumbaran.
