Las empresas «cada vez van más a la financiación no bancaria», especialmente en un país, España, donde este tipo de acceso al dinero acapara cerca del 80 % del total, mientras que en otros países de nuestro entorno se queda en el 50 % y el restante 50 % se logra sobre todo mediante la bolsa o fondos de inversión. Así lo afirma Miguel Navarro, socio bancario y financiero de Broseta Abogados y coordinador del Congreso Español de Derecho a la Insolvencia que se celebró en València entre el 8 y el 10 de marzo.

Navarro explicó a este diario que la gran época de la refinanciación de deuda en las empresas ha pasado ya y que en estos momentos se aprecian dos tendencias: el seguimiento de operaciones para, por ejemplo, mejorar el flujo y caja y anticipar pagos y, por otro lado, empresas que buscan nueva financiación para cancelar la vieja y obtener mejores condiciones que no le supongan un freno para la actividad como sucede con la que tienen ahora.