El despacho valenciano Broseta acaba de abrir una oficina en Lisboa. En el marco del Plan Estratégico 2020 que está llevando a cabo la empresa, y que tiene como objetivo consolidar a la organización entre las firmas legales de referencia, el bufete ha dado un paso más en su estrategia de internacionalización con este desembarco en Portugal, según explica en un comunicado.

La apertura de Broseta en Portugal se ha llevado a cabo a través de la unión con el bufete local Roquette, Morais e Guerra, y responde al creciente interés de las compañías españolas y latinoamericanas por llevar a cabo actividades en un país que está inmerso en un ambicioso proceso de crecimiento y que cuenta con unas notables perspectivas en ámbitos como la financiación exterior, la dinamización de las exportaciones, la inversión empresarial y la generación de empleo, añaden las mismas fuentes.

La oficina en Lisboa contará en su primera fase con una decena de profesionales procedentes del bufete Roquette, Morais e Guerra, con la perspectiva de alcanzar la veintena de abogados hacia finales de año, y estará dirigida por Álvaro Roquette, nuevo socio de la Firma, y por Pablo Bieger, socio de Broseta.

El equipo del despacho que dirige Manuel Broseta llevará a cabo labores de asesoramiento multidisciplinar en Derecho portugués a compañías locales, españolas y multinacionales, focalizando los servicios en una primera fase en los ámbitos bancario, inmobiliario, telecomunicaciones, protección de datos y ciberseguridad.

"Nuestra presencia en Portugal es un hito de relevancia para la organización y es fruto de un exhaustivo proceso de valoración de oportunidades en este país. El equipo de Roquette, Morais e Guerra que se suma a este proyecto cuenta con un profundo conocimiento del tejido empresarial local y de sus necesidades, lo cual junto a nuestro expertise y nuestra cartera de clientes con intereses en la región nos hacen comenzar esta nueva etapa con energía, ilusión y optimismo", valora Manuel Broseta.

Álvaro Roquette, por su parte, considera Portugal como “la extensión natural para Broseta en su estrategia de internacionalización, tanto por las sinergias del tejido empresarial portugués con el español, como por los vínculos comunes con Latinoamérica y las extraordinarias perspectivas del país. En este contexto, nuestro objetivo será acompañar a las empresas españolas con intereses en Portugal, un número cada vez mayor, y a las compañías portuguesas, tanto en sus necesidades locales como en su salida al exterior”.

Vocación internacional

La oficina en Lisboa es la segunda sede física de la Firma fuera de España, junto con la presencia de la organización en Zúrich, Suiza, desde el año 2013. La clara vocación internacional de la firma se completa con la presencia de Broseta en la Red Legal Iberoamericana, una alianza de firmas legales en Latinoamérica que tiene presencia en 13 países y presta servicio en todo el continente a través de más de 400 abogados.