La decisión de la multinacional estadounidense con cuartel general en Atlanta (Georgia) de duplicar la producción de Coca-Cola y otras bebidas en su factoría de Quart de Poblet tras su proceso de reestructuración iniciado en España en 2014, que incluyó el cierre de cuatro plantas, ha tenido consecuencias bastante positivas para la Comunitat. Coca-Cola, cuya embotelladora valenciana impulsaron en 1954 varias familias como los Gómez-Trénor, entre otras sagas de grandes fortunas y empresarios, tuvo un impacto económico, directo e indirecto, de 667 millones de euros, cantidad que representa el 0,7% del Producto Interior Bruto (PIB).
Estas cifras sitúan a la Comunitat Valenciana como tercera autonomía en este «ranking» de Coca Cola en España tras Andalucía (allí cuenta con dos fábricas) y genera 1.137 millones de euros (es decir, el 0,8 % en términos de PIB), mientras que la segunda es Cataluña, donde la conocida firma de bebidas refrescantes alcanza los 1.047 millones de euros (0,5 % de la renta). Así se desprende del Estudio de Impacto socioeconómico de la actividad de Coca-Cola en la Comunitat Valenciana, realizado por la consultora Steward Redqueen, donde se analizan datos financieros y no financieros de la compañía en 2016, la actividad de las oficinas y la planta de embotellado y centro logístico (Silla) de los que dispone, así como la actividad de proveedores de productos y servicios, distribuidores y comercios (hostelería, supermercados y tiendas). Al acto acudieron Yann Guelorget, Director del Área Este de Coca-Cola European Partners Iberia y Ramón Gómez Barajas, Gerente de Producción de CEEP Iberia.
Diversificación y sin azúcar
Coca-Cola cumple 65 años en España con 18 marcas y más de 100 productos, tras su reciente aterrizaje en el mercado de bebidas vegetales, ecológicas y de cafés listos para tomar (que se venden incluso en farmacias) y con el objetivo de convertirse en una «compañía total de bebidas capaz de ofrecer una alternativa para satisfacer a cada individuo y cada ocasión». Además, la firma centra su estrategia de futuro en reducir o eliminar el azúcar de sus bebidas, que ya representan casi la mitad de su oferta de bebidas.
Desde el año 2014 Coca-Cola ha convertido la planta de Quart de Poblet en una Big Site dentro de la red industrial de CCEP en España y Portugal, con una capacidad de producción de entre 550 y 600 millones de litros al año; es decir, similar a la instalada en las de Barcelona y Andalucía. En este tiempo, ha duplicado su capacidad de embotellado, de manera que ha pasado de disponer de cinco líneas de fabricación a diez.
Esta tarea ha supuesto una inversión de 32 millones de euros. Para el año 2018 prevé una inversión de 7,6 millones de euros en la ampliación de las actividades logísticas en València, así como en la adaptación de las líneas para la incorporación del nuevo tapón aligerado en botellas, entre otros proyectos.
Actualmente se consumen más de ocho millones de litros de sus bebidas cada día y durante los 65 años de vida en España se han vendido más de 84.200 millones de litros de referencias de la firma.
Presente en España desde 1953 y con una contribución total a la economía española de 6.315 millones de euros, la multinacional de EE UU se convirtió rápidamente en una de las bebidas más populares del país y no tardó en ampliar la cartera de productos con nuevas marcas.
