El exdirector general de Bancaja, Aurelio Izquierdo, asestó el pasado miércoles un severo golpe en la línea de flotación de la defensa de algunos exdirectivos del Banco de Valencia (BdV). Durante su comparecencia ante el juez de la Audiencia Nacional que instruye la causa por el hundimiento del Banco de Valencia, Santiago Pedraz, Izquierdo, quien fue consejero delegado y presidente de la entidad en el mes y medio previo a su intervención por el Estado en octubre de 2011, afirmó que «no puede ser que no supieran nada» sobre las inspecciones realizadas por el Banco de España varios exconsejeros, entre los que citó a Agnès Noguera, Antonio Tirado y el recientemente fallecido Juan Antonio Girona, de quienes afirmó que eran personas muy próximas a Domingo Parra, primer ejecutivo de la entidad entre 1994 y octubre de 2011, cuando fue sustituido por el entonces director de negocio de Bankia.

La cuestión de si Parra informó o no al consejo de administración de las inspecciones del supervisor que instaban a tomar medidas para cubrir el creciente agujero que acabó con el banco es una de las claves de la mencionada instrucción. Según fuentes jurídicas consultadas por este diario, Izquierdo admitió que tuvo una copia de un informe de mayo de 2011 sobre una eventual fusión con el Banco Gallego en el que se estimaban que las pérdidas en las que ya incurría la entidad valenciana ascendían a 872 millones. Tras su intervención, requirió 5.500 millones de dinero público.

Aurelio Izquierdo aseguró también que José Luis Olivas, presidente de Bancaja y del BdV entre 2004 y 2011, no tenía funciones ejecutivas en la entidad, aunque era una personas bien informada de todo lo que sucedía en la misma. Asimismo, aseguró que en estos momentos su relación con Parra es distante, aunque fueron amigos y compartieron negocios por los que los dos están siendo investigados por la Justicia.

Ayer compareció el exinterventor del banco Juan Ignacio Hernández, quien, en su afán por desvincularse de cualquier irregularidad, negó incluso los correos electrónicos que le presentaron, según las fuentes consultadas, que afirman que este exdirectivo llegó a decir que no se explicaba cómo se hundió el banco.