Buenas noticias para Cabify. Pese a los últimos cambios legales y la reciente sentencia del Tribunal Supremo que frenan definitivamente la expansión del modelo Uber, los fallos judiciales van a hacer que se dispare el número de licencias VTC con las que se hace la competencia al taxi.
Solo en el caso de la Comunitat Valenciana se va a cuadruplicar el número, al pasar previsiblemente de las actuales 236 a 877. Se esperan 641 autorizaciones más en los próximos meses en Valencia, Alicante y Castelló.
Las licencias VTC son las que tradicionalmente han utilizado los chóferes de limusina o empresas de transfer entre los aeropuertos y las ciudades. Sin embargo, estas plataformas tecnológicas que ponen en contacto a conductores y pasajeros abrieron un nuevo nicho de mercado, y dispararon el valor de los permisos en el mercado secundario. Apenas pagando una tasa administrativa se podía entrar a competir con un sector regulado, el del taxi, donde las licencias se cotizan en decenas de miles de euros.
Este fenómeno y la liberalización del sector que decretó el Gobierno en 2009 creó la tormenta perfecta para el taxi. Las empresas pidieron miles de estos permisos y saltó por los aires el tradicional equilibrio blindado por ley de una licencia VTC por cada 30 taxis. El Gobierno de Rajoy volvió a establecer esa ratio en 2013, pero el reglamento que desarrollaba la ley no llegó hasta noviembre de 2015.
Ese vacío legal ha sido la puerta de atrás por la que se han colado las plataformas y las empresas que les prestan los conductores. Pese a la reciente sentencia del Supremo que da por buena esa limitación 1/30 y cierra las puertas a la liberalización del sector, se da por hecho que la justicia obligará a conceder todas las licencias pedidas hasta el 21 de noviembre de 2015. Incluso en las administraciones que, como la valenciana, más se han resistido a conceder estos permisos.
«Todas las solicitudes de autorizaciones VTC que se pidieron hasta el día inmediato anterior a la entrada en vigor del Real Decreto 1057/2015 deben ser concedidas, ya que el Tribunal Supremo entiende que hasta esa fecha no había una norma que impidiese el otorgamiento de autorizaciones», reconocen desde la Conselleria de Transportes. Es decir, que las limitaciones cuantitativas 1/30 no estaban en vigor hasta finales del año 2015.
Esos supone que las 641 autorizaciones pedidas antes de esa fecha, denegadas y que están pendiente de sentencia firme, serán finalmente concedidas. Entre quince y veinte empresas serían las beneficiarias de estas autorizaciones. La sentencia firme no siempre es del Supremo, también puede ser del Tribunal Superior de Justicia.
La expectativa de negocio ha hecho, en realidad, que la avalancha de peticiones haya ido a más con el paso de los meses. Según la conselleria, las autorizaciones solicitadas a partir del 22 de noviembre de 2015 superan las tres mil. Concretamente, las empresas han solicitado 2.762 en València, 183 en Alicante y 68 en Castelló.
Sin embargo, con la jurisprudencia del Tribunal Supremo cabe entender que van a ser todas denegadas. De hecho, las primeras sentencias dictadas desestiman los recursos de nuevas peticiones de autorizaciones VTC a partir de 22 de noviembre de 2015.
Será en las próximas fechas, conforme vayan llegando las sentencias, cuando crezca el número de licencias en las calles de la C. Valenciana, sobre todo en València. Algo que permitirá incrementar su negocio a plataformas como Cabify. En estos momentos hay 236 autorizaciones VTC en la Comunitat Valenciana, frente a más de 4.000 licencias de taxi.
