La crisis ha sido una hecatombe de proporciones no vistas en décadas, pero sus consecuencias han sido dispares según la clase social. La media alta de la Comunitat Valenciana, es decir, los ricos, ha aumentado un 11,4 % entre 2007 y 2016 al pasar de un 9,6 % del total a un 10,6 %, según el estudio «Oportunidades de empleo y renta en España 2007-2016» elaborado por la Fundación Ramón Areces y el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (IVIE), que fue publicado ayer. El dato es más llamativo, si cabe, si tomamos en consideración que en el conjunto de España este colectivo registró un descenso del 18,8 % (del 14,2 % al 11,5 %) y que la Comunitat Valenciana ha sido una de las zonas más castigadas por la recesión debido a sus excesos en el sector inmobiliario.

Paralelamente, a los pobres les ha ido francamente mal en la autonomía. Si en 2007 representaban el 30,8 % del total, una década más tarde ese porcentaje había subido al 36,2 %, lo que implica un aumento del 17,4 %. La clase media baja se contrajo en un 3,1 %, hasta el 31,4 %, y la media lo hizo en un 20,1 %, hasta el 21,8 %.

En el conjunto de España, el número de pobres se elevó también al 36,2 %, es decir, un 21,9 % más. La autonomía que experimentó un mayor incremento en el número de pobres fue Cataluña, con un 51,5 %. La que más lo hizo en cuanto a ricos fue Aragón, con un 21,6 %. Inmediatamente a continuación figura la Comunitat Valenciana.

El informe destaca cómo el aumento de la pobreza ha sido especialmente alarmante entre los menores de 30 años, que en el conjunto de España han visto cómo se doblaba su peso en el segmento de población con menores recursos. El documento analiza los dos aspectos clave del bienestar material de los ciudadanos, que son la renta y el empleo. La pérdida de puestos de trabajo «ha sido el aspecto más importante de la crisis, llegando a alcanzar a más de la cuarta parte de la población activa en 2013», dice el informe, que añade que en 2016 las oportunidades de empleo eran un 20 % peores a las que había en 2007. Entre los menores de 30 años, el deterioro de las condiciones de empleo alcanza el 40 %. Si en 2007 el 50 % de ellos tenía trabajo indefinido, en 2016 no llegaban al 30 %.

En cuanto a la renta, el porcentaje de población de la Comunitat Valenciana con una renta igual o mayor que la renta per capita de España en 2007 registró un descenso del 12 %, inferior en dos puntos a la media.