La junta directiva de la patronal CEOE dio ayer el visto bueno por unanimidad al principio de acuerdo alcanzado con los sindicatos mayoritarios UGT y CC OO para elevar los salarios durante los tres próximos años, un pacto que deberá ser ahora ratificado por los sindicatos. Para Juan Rosell, presidente patronal, «el empresario español está haciendo un esfuerzo para mejorar la sociedad», al tiempo que muestra el consenso de la sociedad civil y genera confianza y estabilidad.

Rosell califica de «importante» el alza firmada para los próximos tres años -de en torno al 2 %, más un 1 % adicional en función de la productividad de cada sector y de la situación de las empresas-, porque «da estabilidad, tranquilidad y muestra una mayor amplitud de miras». Al mismo tiempo, ha considerado una «apuesta importante» que da un empujón a los salarios bajos, ya que el pacto incluye que el salario mínimo en convenio se sitúe en los 14.000 euros anuales en 2020.

Mientras tanto, el presidente de Cepyme, Antonio Garamendi, fue un poco más allá al recordar que la subida salarial pactada en el acuerdo «se hace con el dinero de las empresas». «Es un esfuerzo que se hace con nuestro dinero y eso no hay que olvidarlo", ha subrayado Garamendi.

Al igual que la patronal, los sindicatos deben ahora someter a sus órganos confederales este acuerdo, algo que llevará a cabo CCOO el próximo jueves y UGT el miércoles 4 de julio, si bien el sindicato que lidera Pepe Álvarez está llevando a cabo también una consulta entre sus bases.

Punto de inflexión

Para Álvarez, este IV AENC supondrá un punto de inflexión en la recuperación de los salarios y servirá para recuperar «tranquilidad y sosiego» en las relaciones laborales, en tanto que Sordo confía en que suponga un revulsivo en la recuperación de los salarios y derechos laborales, si bien ahora «toca plasmarlo en los convenios colectivos».

Desde el Ministerio de Trabajo se remiten a las valoraciones que realizó la ministra, Magdalena Valerio, que lo consideró «muy bueno para mejorar las condiciones de vida de los trabajadores y para incrementar las cotizaciones a la Seguridad Social».

Sin embargo, no todo son alabanzas y desde el sindicato USO aseguran que este acuerdo no servirá para recuperar el poder adquisitivo perdido en los últimos años, para lo que serían necesarias subidas del índice de precios de consumo (IPC) más de un 4 % durante al menos los tres próximos años.