Los fabricantes de acero Thyssenkrupp y Tata Steel han firmado un contrato para fusionarse y crear el segundo mayor grupo siderúrgico de Europa. La multinacional germana cuenta con una factoría en Sagunt, reabierta a finales de 2016 tras años de paralización por la crisis económica.

La nueva compañía se llamará Thyssenkrupp Tata Steel B.V.. "Esta alianza nos permite asegurar de forma duradera una posición competitiva en la industria europea del acero, con un concepto industrial convincente y sobre la base de una lógica estratégica clara", destacó el presidente de Thyssenkrupp, Heinrich Hiesinger.

"De esta forma mantendremos los puestos de trabajo a largo plazo y conservaremos las cadenas de valor en industrias europeas claves", explicó.

La fusión representa para Thyssenkrupp el fin de una era. El mayor productor de acero de Alemania se retirará en gran parte del negocio del acero, sometido a constantes fluctuaciones.

Thyssenkrupp ostentará una participación del 50 % de la nueva empresa con sede en Holanda, que será la segunda de Europa tras ArcelorMittal y contará con unos 48.000 empleados y plantas en Alemania, Reino Unido y Holanda.

Reacciones sindicales

Los representantes de los trabajadores se han mostrado dispuestos a apoyar la fusión tras protagonizar fuertes protestas tras el anuncio de los planes de fusión.

"Por fin tenemos claridad y los empleados saben finalmente hacia dónde vamos", dijo el presidente del comité de empresa de la división de acero de Thyssenkrupp, Tekin Nasikkol. "Esperamos que la directiva haga participar a la plantilla en el proceso y que las decisiones se comuniquen con transparencia".

Los trabajadores siderúrgicos alemanes, segñun fuentes de DPA, obtuvieron anteriormente una garantía de empleo hasta el 30 de septiembre de 2026 así como la seguridad de que no se cerrarán sus plantas. Sin embargo, también está prevista la supresión de hasta 4.000 puestos de trabajo, la mitad de ellos en Alemania.