La Generalitat ha decidido dar un giro a las ayudas al emprendimiento tras analizar a fondo el ecosistema empresarial valenciano. El Consell va a primar a los menores de 35 años, a las startups y a las empresas emergentes que se encuentran en una fase de consolidación, según indicó ayer el conseller de Economía Rafa Climent durante la presentación del Plan Estratégico del Emprendimiento. La secretaria autonómica de Economía, Blanca Marín, destacó que el objetivo es pasar del modelo impulsado por el PP durante la crisis del «emprendimiento por necesidad, que tantos problemas ha dado, al emprendimiento por oportunidad. Buscamos asesorar y ayudar en la fase inicial y apoyar la consolidación y el crecimiento».

Marín lamentó que en el modelo anterior «se motivó a los ciudadanos en paro a responsabilizarse de su situación para que dedicaran su prestación por desempleo a iniciarse como autónomos emprendedores. Después, no había ningún tipo de medida de apoyo. La tasa de fracaso de estas iniciativas llevadas por pura necesidad ha sido enorme y ha producido situaciones dramáticas».

En este sentido, Climent subrayó que entre 2018 y 2023 se van a incrementar los recursos destinados a las fases de crecimiento y consolidación de las empresas «ya que anteriormente todos los esfuerzos se realizaban en la fase de motivación y creación, y luego la mayoría desaparecía tras el primer año». En 2018 la partida de ayudas para la fase de crecimiento se ha duplicado al pasar de 7,9 a 15,7 millones mientras que los recursos para la fase de consolidación han aumentado un 36 % al situarse en 8,5 millones de euros.

Menores de 35 años

El plan pone el foco en mejorar las ayudas al emprendimiento a menores de 35 años porque se ha detectado que es el colectivo con mayores dificultades. El Consell se ha apoyado en un estudio de diagnóstico sobre el emprendimiento de la Universidad Miguel Hernández que destaca que el desempleo «es un problema mucho mayor entre los menores de 35 años debido a las dificultades de acceso al mercado de trabajo».

El Consell también considera imprescindible dar un impulso al emprendimiento de base tecnológica mediante el fomento de programas de apoyo especializados en servicios avanzados para startups como asesoramiento.

Otra prioridad del plan es el sistema educativo ya que además de potenciar el emprendimiento universitario se va a fomentar la formación emprendedora en las primeras etapas escolares.

Perfil del emprendedor

El estudio de la Miguel Hernández destaca que el prototipo de emprendedor es el de un varón (6 de cada 10 son hombres) de en torno a los 40 años (la mayor frecuencia es una edad de entre 45 y 54 años). Más del 50 % cuenta con estudios superiores y más del 52 % tiene una formación específica en emprendimiento. Actualmente, la mayoría de las personas emprenden más por oportunidad que por necesidad.

El 80 % de las iniciativas empresariales son del sector terciario y de servicios (el 57 % están relacionadas con el consumo) y tienen un tamaño modesto ( el 50 % son proyectos individuales y solo un 15 % generan más de cinco empleos). El 25 % de los proyectos son innovadores.

El estudio destaca que la Comunitat Valenciana debe mejorar en la educación emprendedora en edades tempranas, en materias como la financiación, y en fiscalidad y burocracia.