Los turistas extranjeros que visitan la Comunitat Valenciana gastan el doble que los nacionales. La llegada de turistas extranjeros ha crecido de forma exponencial con los vuelos de bajo coste, pero su poder adquisitivo es muy superior al de los españoles. El Informe Anual de la Distribución Comercial Minorista 2017, que acaba de hacer público la Oficina del Pateco del Consejo autonómico de Cámaras, revela que los viajeros extranjeros que el año pasado llegaron a la C. Valenciana tuvieron un gasto medio al día de 95,5 euros frente a los 43,6 euros al día que desembolsaron de media los visitantes nacionales.

El año pasado, 28 millones de viajeros (8,9 millones de extranjeros y 19,1 millones de españoles) visitaron la Comunitat Valenciana y dejaron 1.185 millones de euros en los comercios. El estudio apunta que las compras de los turistas aumentaron un 10 %. Estos datos refuerzan las tesis de los partidarios de la libertad de aperturas en domingos y festivos para aprovechar el máximo el tirón del consumo turístico.

El gasto turístico total (que incluye transporte, alojamiento, ocio y el resto de conceptos) se elevó hasta los 11.903 millones de euros. Según los responsables del informe, la mayor parte de este gasto correspondió a los turistas que se alojaron en segundas residencias y apartamentos, con un total de 807 millones de euros durante el año pasado. Esto se debe a que son los alojamientos más numerosos en la Comunitat Valenciana (hay más de 650.000 segundas residencias en las tres provincias) y a que necesitan abastecerse de todo (reproducen el modelo de compra de su municipio de origen y destinan la mayor cuantía del gasto en comercio a la compra de alimentos y bebidas). El 65 % de compras que realizaron este tipo de visitantes fue en alimentación y productos de droguería frente a solo el 10 % que destinaron, por ejemplo, a la adquisición de ropa, calzado o complementos.

Casi un tercio de los turistas que el año pasado eligieron la Comunitat Valenciana (8,6 millones) se alojó en hoteles. Estos visitantes compraron productos en los comercios valencianos por más de 229 millones de euros. El 34 % de su dinero en compras lo destinaron a la partida de productos relacionados con el ocio y cultura, tecnología y otros productos de consumo ocasional. Por último, quienes apostaron por establecimientos extrahoteleros (como campings) se dejaron 148 millones de euros en el comercio local y, al igual que los usuarios de apartamentos, la mayor parte del presupuesto fue para alimentación y productos diarios. El gasto realizado por los turistas en los comercios supuso el año pasado un 6% de la facturación del sector, frente al 84% que representan las compra de los valencianos y el 9% que suma el abastecimiento a otro tipo de negocios.

En cualquier caso, el porcentaje varía mucho entre las poblaciones de costa y de interior. Este es uno de los principales criterios que se tiene en cuenta a la hora de delimitar las zonas de libertad horaria. En toda la Comunitat Valenciana existen 63 zonas declaradas de gran afluencia turística. En la ciudad de València la «barra libre» de aperturas en domingo arranca en junio (coincidiendo la temporada turística estival) y termina a mediados de enero (con el fin de la campaña de Navidad).