La Conselleria de Economía se ha apuntado un tanto con el sector cerámico al arrancar a Iberdrola un compromiso de inversión de 23,5 millones que, en último término, va a repercutir en una rebaja de la factura de la luz para este clúster industrial.
Como viene contando Levante-EMV desde hace meses, la secretaria autonómica de Economía, Blanca Marín, ha negociado con la distribuidora y el sector para mejorar los costes energéticos y ayudar a esta industria, que exporta a todos los países del mundo, a ser competitiva frente a productores como Italia o Turquía.
Debido al sistema de peajes, conectarse a una red de mayor potencia permite obtener precios de la luz más competitivos. En el caso de la cerámica, se trata de un sector de consumo intensivo.
Las grandes empresas azulejeras están conectadas a redes de 20 kilovoltios (KV), con lo que pagan su energía más cara. Sin embargo, en el área de Castelló existen desde hace tiempo redes de 66 KV. Las inversiones van a concentrarse allí, en los municipios de Onda, Vila-real, Alcora, Almassora, Castelló, Burriana, Vall d'Uixò, etc, donde tiene su sede el grueso del sector. En concreto, estos 23,5 millones para el periodo 2019-2021 se van a destinar a aumentar la capacidad, renovación y mejora del sistema de 66 KV, de modo que conectarse sea más atractivo para estas empresas.
Blanca Marín, la directora general de Industria, Empar Martínez, y responsables de Iberdrola celebraron ayer en Castelló una jornada informativa para la patronal cerámica Ascer sobre la viabilidad técnica y económica de conectarse a redes de tensión superior a los 20 kilovoltios a los que están enganchados actualmente.
En estos momentos, el desglose de la factura de la luz revela que solo el 37% se corresponde a la energía, el 22% son impuestos y el 41% son peajes de acceso al sistema. En este sentido, los industriales cerámicos se ven penalizados al conectarse a redes de tensión por debajo de los 30 KV.
Según el ejemplo que expuso la administración, pasar de los actuales 20KV a una conexión a 66 KV provocaría un ahorro anual de 303.852 euros para una gran industria. Cambiar la conexión de una red (20 KV) a otra (66 KV) tiene un coste para cada empresa que puede oscilar entre el millón y los 1,65 millones, pero la inversión estaría amortizada entre tres y cinco años, según los casos.
Según el estudio que ha promovido la Dirección General de Industria, hasta sesenta empresas azulejeras de Castelló podrán ver reducida a partir de ahora su factura eléctrica en un 20%.
Buena acogida del sector
Durante la presentación, el presidente de la patronal azulejera Ascer, celebró: «Desde la industria acogemos muy positivamente el nuevo enfoque en la planificación de infraestructuras energéticas y en concreto en las de electricidad, que ha iniciado la Dirección General de Industria y Energía con el objetivo de alinear las inversiones en redes con las necesidades de los consumidores».
En la inauguración, la secretaria autonómica de Economía Sostenible, Sectores Productivos y Comercio, Blanca Marín, manifestó que el plan para incrementar la tensión en la red se enmarca en un plan de ámbito más general que busca dar soluciones y apoyo la industria puesto que «es el sector que genera empleo de mayor calidad al acoger personal más cualificado y con mayor estabilidad de empleo».
