Las acciones de Telefónica cayeron ayer un 1,6%, lo que hace que se mantengan en sus niveles más bajos desde octubre de 2002, después de que JP Morgan rebajara su recomendación sobre la compañía como consecuencia del impacto en sus cuentas de los cambios de divisas, así como del coste del fútbol y el espectro, y de la fuerte competencia en España.

En concreto, las acciones de Telefónica, que cayó a la sexta plaza del escalafón del Ibex 35 tras verse superada por Amadeus y el BBVA, concluyeron la sesión en los 6,682 euros, lo que equivale a un descenso del 1,62%.