La Unió de Llauradors pone en evidencia que la propia Comisión Europea reconoce que para alcanzar un Acuerdo de Asociación con los países del Mercosur debe hacer concesiones de acceso al mercado del arroz. En estas negociaciones, Mercosur ha expuesto claramente varios intereses económicos, entre los cuales destaca la mejora de las condiciones de acceso al mercado europeo para sus exportaciones de arroz.

En este sentido, la propia Cecilia Malmström, comisaria de Comercio de la Comisión Europea no desmiente -a una pregunta formulada por la eurodiputada castellonense de Izquierda Unida, Marina Albiol- que la intención sea la de facilitar la entrada de hasta 100.000 toneladas anuales de arroz a los mercados comunitarios procedentes de los países del Mercosur a cambio que este bloque de países facilite la entrada ventajosa de productos procedentes de la industria automovilística.

Priroridades de la Unión Europea

La Unió de Llauradors considera que la respuesta oficial “pone de manifiesto que para Mercosur la exportación de arroz a la UE es una de sus prioridades y que se sumarían a las ingentes cantidades de arroz procedentes de los países productores de Asia que ya inundan los mercados europeos y ponen en peligro la producción de la Comunitat Valenciana”.

De concretarse las negociaciones, muy avanzadas ya, supondrían un mazazo para los productores europeos y, principalmente, para los valencianos ya que el arroz que se produce en aquellos países es principalmente del tipo japónica (redondo), el mismo de las zonas productoras valencianas.

Por su parte, la comisaria Cecilia Malmström afirma que son necesarias estas importaciones de arroz porque la producción europea cubre poco más de la mitad del consumo de la UE, pero, según LA UNIÓ, se olvida de mencionar la influencia que van a tener estas entradas de arroz de Sudamérica sobre los precios del producto y la reducción de renta que va a suponer para los arroceros valencianos.

LA UNIÓ, como ya se manifestó en el CETA o el TTIP, se muestra contraria a este tipo de macroacuerdos comerciales que sólo benefician a las multinacionales y no conllevan ningún beneficio para el productor. Así, insiste en que es necesario que la Comisión Europea realice un informe exhaustivo de las repercusiones económicas, laborales, sociales y medioambientales que tendría sobre el sector arrocero europeo -y sobre otros sectores- el Acuerdo de Asociación entre la Unión Europea y Mercosur.

Mercosur y arroz

Mercosur se estableció en 1991 y engloba a Argentina, Brasil, Paraguay, Uruguay y Venezuela, que se unió oficialmente en julio de 2012. También en diciembre de este año se firmó el protocolo de adhesión de Bolivia, todavía por ratificar.

Del grupo de países de Mercosur, el principal exportador de arroz es Uruguay que ya en la campaña 2015/2016 exportó a la Unión Europea 35.464 toneladas.

En las negociaciones, ambas parten asumen la plena liberalización para todos los sectores de bienes industriales en el lado de la UE tanto para escenarios conservadores como ambiciosos. Con respecto a los productos agrícolas, para la UE se aplicarán reducciones arancelarias parciales para el arroz, azúcar, carne de rumiantes y otras carnes en ambos escenarios y para los cereales y productos lácteos en el escenario conservador. En los casos restantes, se aplicarían reducciones arancelarias del 100%.

Para el Mercosur, la liberalización total del 80% de las líneas arancelarias se lleva a cabo en el escenario conservador y el 100% en un escenario ambicioso. Esta reducción de aranceles puede resultar también perjudicial para otras producciones agrícolas y ganaderas.