El grupo Comatel va a invertir en residencias de estudiantes de gama alta tras desplegar en València la cadena de lujo Myr Hoteles. La firma, con sede en Catarroja, busca inmuebles para transformarlos en alojamientos para universitarios en las inmediaciones de la Universitat, la Politècnica y de la Universidad CEU Cardenal Herrera. La idea de Comatel es captar a universitarios internacionales y abrir residencias como la del grupo inversor británico Princenton Investment en la calle Francisco Cubells, según confirmó Fidel Molina, cofundador de Comatel. Una plaza en la residencia de Princenton Investment cuesta entre 806 y 1.035 euros al mes.
El movimiento de Comatel, que ha invertido 56 millones en su red de hoteles en la capital, se produce en un momento en el que València está en el punto de mira de los fondos y de las cadenas hoteleras que apuestan por las residencias de estudiantes por su alta rentabilidad. Un informe de la consultora JLL revela que en València hay 103.418 estudiantes universitarios (más de ocho mil extranjeros) y solo un 3 % de ellos se aloja en residencias ante la escasez de plazas. En la ciudad están funcionando una veintena con 3.100 plazas.
Valéncia es la segunda ciudad española más valorada entre todos los «erasmus» de Europa por la calidad de las universidades y el nivel de vida, según el portal de reservas de alojamiento universitarios Uniplaces, que realizó una encuesta a 26.000 estudiantes. La capital del Turia solo es superada por Madrid. Según la consultora JLL, las residencias de estudiantes serán uno de los activos inmobiliarios más demandados por los inversores en los próximos años. La rentabilidad de este tipo activos es del 5,75 %.
Fidel Molina explicó que todavía no han encontrado un inmueble que se ajuste a sus necesidades, pero incidió en que están analizando a fondo el mercado. «Queremos dar un servicio diferenciado como hacemos en nuestros hoteles. Es la misma idea que la residencia de los británicos en el Cabanyal, pero nosotros queremos diferenciar los alojamientos por edades», subrayó Fidel Molina.
Otro grupo que ha apostado por este tipo de alojamientos para universitarios es la promotora Urbania. La compañía se alió con la gestora MiCasalnn para convertirse en el primer operador de alojamientos residenciales en España. Urbania está invirtiendo en todo el país doscientos millones de euros. La firma se va estrenar en València con un proyecto de 440 camas en Alboraia (en la zona de la Patacona) en el que invertirá unos 35 millones. Concretamente, ha comprado un edificio que será totalmente rehabilitado y que cuenta con una superficie total de casi 22.000 metros cuadrados distribuidos en siete plantas más ático y sótano. El inmueble dispondrá además de servicios comunes de ocio como restaurante, gimnasio, zona de juegos, bar, área de coworking y recepción.
Crecimiento agotado
Comatel entra en el segmento de las residencias estudiantiles una vez que ha agotado sus posibilidades de crecimiento en el sector hotelero en València. El grupo ha estado centrado hasta ahora en la creación de una cadena de hoteles de lujo en lugares emblemáticos de la capital. El primer hotel que abrió fue el Mir Plaza del Mercado frente al Mercado Central. Después adquirió un edificio para un apartahotel en la plaza Calabazas y dos inmuebles que unió para el hotel del Café Madrid (junto al palacio Marqués de Dos Aguas). Hace un año y medio arrendó la casa palacio Valier en la plaza de Manises para su primer hotel de 5 estrellas y en octubre de 2017 adquirió por 5,8 millones la sede del PSPV para un establecimiento frente a las Torres de Serranos.
