La Comisión Europea ha aprobado una subvención de un máximo de 11,8 millones de euros a la naviera Baleària para ayudarle a financiar el proyecto de remotorización de cinco de sus ferries para que puedan funcionar con gas natural licuado. Una iniciativa con la que la firma presidida por Adolfo Utor quiere hacer más ecológica su flota, ya que este combustible reduce notablemente las emisiones a la atmósfera.

Según ha informado la propia naviera, la ayuda europea supone aproximadamente un 20% del total de la inversión que será necesaria, que se desarrollará en varios ejercicios, desde finales de este año hasta 2021.

En concreto, el proyecto de Baleària supondrá la remotorización de los ferries Nápoles, Abel Matutes, Sicilia, Bahama Mama y Martín i Soler, lo que permitirá reducir anualmente más de 45.000 toneladas de dióxido de carbono, 4.400 toneladas de óxido de nitrógeno (NOx) y eliminar totalmente las emisiones de azufre y partículas. El primero de los buques en cambiar sus motores será el Nápoles, a partir de mediados de noviembre.

La Unión Europea ha calificado de excelente el proyecto, al que ha concedido la máxima puntuación -un cinco sobre cinco-, destacando que «permite abordar los objetivos del Reglamento 1315/2013 en lo relacionado a eficiencia, sostenibilidad y cohesión, y que contribuirá a la descarbonización del transporte marítimo».

La comisión evaluadora también ha considerado que el proyecto está listo para implementarse, ya que «técnicamente está muy elaborado y su financiación está asegurada». Así, además de destacar el apoyo de tres bancos preparados para cubrir el préstamo necesario, indica que «el análisis de costes-beneficios se basa en una metodología sólida y es exhaustivo». Finalmente señala que dispone de prácticamente todas las aprobaciones necesarias a nivel nacional, regional y local.

Cabe recordar que, a partir de 2020, las compañías navieras que operan dentro de la Unión Europea y las aguas de la zona económica exclusiva tendrán que usar combustibles con bajo contenido de azufre.

El presidente de Baleària, Adolfo Utor, mostró su satisfacción por esta concesión, que, según recalcó, respalda el principal reto de la naviera con sede en Denia: implantar en los próximos años el uso de gas natural licuado en la flota.