Ford realiza un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) de 13 jornadas en la planta de motores y reducirá 9 días la producción de vehículos (Kuga, S-Max, Mondeo, Galaxy, Transit Connect y Transit Tourneo) a partir de este mes de noviembre como consecuencia de la caida de ventas y descenso del consumo en Europa, su principal mercado.

La dirección de Ford Almussafes ha comunicado a los sindicatos esta decisión en la reuión de la comisión consultiva celebrada esta mañana, que se produce dos semanas después del encuentro celebrado en Colonia por los dirigentes de la multinacional en Europa para anunciar su plan de ajustes que conllevará el cierre de plantas y despidos de trabajadores.

La factoría de Almussafes, pese al recorte de producción en vehículos, asegura que recuperará esos días en jornadas extraordinarias de producción a lo largo del próximo año.

En medios sindicales sorprende la decisión de la compañía, ya que a lo largo de mes de octubre ha habido producción durantre tres sábados.

El presidente de Ford Europa, Steven Armstrong, dibujó un panorama muy negro en su reunión del pasado 9 de octubre con el comité de empresa intercentros y anunció a los dirigentes sindicales que la compañía «debe volver a ser rentable a partir de 2019», según indica el comunicado del Comité de Empresa Europeo de Ford (FEWC). Sin concretar la repercusión en cada una de sus fábricas y personal de automóviles, motores y centro de diseño (España, Inglaterra, Francia, Alemania, Turquía y Rumanía), el máximo ejecutivo del grupo en el viejo continente explicó que la dirección de Dearborn (Detroit) -es decir el cuartel general de Ford Motor- está «extremadamente insatisfecha» con los número rojos en Europa y «está perdiendo la paciencia».