La empresa Zender, ubicada en el polígono Juan Carlos I de Almussafes y dedicada a prestar servicios a Ford España, echará el cierre cuando termine el año. Según apuntan desde CC OO, Ford ha decidido recuperar la carga de trabajo que tenía externalizada en la filial de esta multinacional alemana. Zender, con tres décadas de trayectoria en València, coloca complementos en los vehículos ya terminados, como embellecedores o ganchos para remolque.

Ya en 2017 se quedó sin los trabajos auxiliares para el Kuga, lo que supuso la pérdida de un número significativo de empleos. Ahora, con el fin del contrato de los restantes modelos el próximo 31 de diciembre, la empresa tramita un ERE de extinción para los 34 empleados fijos, según fuentes de CC OO. Además, hay otra quincena de eventuales que irán saliendo en las próximas semanas conforme terminen sus contratos.

El cierre de esta compañía se produce como consecuencia de la caída de producción y la incertidumbre que afecta a Ford España. Fuentes sindicales señalan que esta carga de trabajo no volverá a ser externalizada, sino que la absorbe Ford para recolocar a trabajadores.El descenso de la demanda de vehículos y, por tanto, de la producción, ha llevado a Ford a realizar ajustes entre su plantilla que, de momento, están sorteando los despidos y se resuelven con ERE´s temporales.

Con este movimiento, Ford deshace el camino que desde hace años le ha llevado a externalizar trabajos como este para abaratar costes.

La desaparición de Zender es un botón de muestra de la inestabilidad a la que se ve abocada la industria auxiliar por el efecto arrastre de Ford. Muchas de estas empresas han conseguido diversificar su producción y reducir su dependencia del fabricante americano. Otras, como esta, solo trabajan para Almussafes. Se trata, además, del primer cierre en una empresa auxiliar que vive el complejo automovilístico desde hace tiempo. Se une a todos los expedientes de regulación de empleo temporal (ERTE) que están viviendo las firmas del polígono.

Desde CC OO se ha reclamado a Zender que, en caso de reapertura, se reincorpore a los despedidos. Empresa y sindicatos han pactado 32 días y medio de indemnización para los contratados antes de la reforma laboral de 2012, y 26 para los posteriores.