La dirección de Ford Almussafes, al menos por el momento, tan sólo ofrece garantizar el 70 % de los salarios a los trabajadores afectados por el expediente de regulación temporal de empleo (ERTE), que implicará a casi 7.000 empleados de la compañía durante 22 días (13 a los de motores y 9, a los de plantas de producción de vehículos) entre los meses de noviembre y enero de 2018.

Al término de la reunión de ayer entre los representantes de la multinacional del automóvil y los sindicatos, dentro del período de consultas, esta propuesta ha sido calificada por el sindicato mayoritario UGT como «insuficiente». La propuesta de pagar los salarios hasta el 70% está lejos de lo que demanda UGT, pues reclama para la plantilla las mismas condiciones que en la planta de motores ; es decir, un 80% del salario bruto más el 100% de vacaciones.

Para Intersindical-STM se trata de una «provocación de propuesta». Según el portavoz de esta organización, Francisco González, «con ganancias de 575 millones de euros en Almussafes durante los últimos cuatro años la empresa no puede presentar esta oferta». También Comisiones Obreras y CGT rechazan dicha oferta de la dirección de la firma del óvalo.

La empresa considera el día 31 de octubre como jornada industrial para turnos diurnos y el 18 para el nocturno, pero el día 30 sería laborable para el turno de noche. La nueva reunión del periodo de consultas ha analizado el ERTE que afectará a la práctica totalidad de la plantilla, de 7.800 trabajadores, excepto a la planta de recambios -que tiene un centenar de empleados para suministrar piezas a los concesionarios- y a los servicios de seguridad, protección de incendios y mantenimiento de las instalaciones. Ford Almussafes negocia este ERE temporal en vísperas de que la multinacional anuncie los nuevos planes de ajustes y de reestructuración en todas sus fábricas de Europa para volver a ser rentable.

Evolución del mercado

Mientras tanto, las ventas de vehículos diésel coparon el 33% del mercado automovilístico europeo en septiembre, lo que se traduce en una caída de nueve puntos porcentuales respecto al mismo mes del año anterior. Las matriculaciones de vehículos impulsados por gasolina aumentaron siete puntos porcentuales el mes pasado en comparación con septiembre de 2017, hasta alcanzar un 58% de las entregas totales, al igual que las de alternativos, que pasaron de un 5,4% a un 7,9%, según datos de Jato Dynamics recogidos por Europa Press.