Los agentes sociales de la Comunitat Valenciana abogaron ayer por la concertación social a pesar de sus diferencias sobre la Reforma Laboral, aquella norma impuesta en 2012 por el Gobierno central de Mariano Rajoy y alentada por la patronal CEOE. Los secretarios generales de Comisiones Obreras y UGT-PV, Arturo León e Ismael Sáez, respectivamente, participaron ayer junto con el presidente de la patronal valenciana CEV, Salvador Navarro, en la mesa redonda organizada por el Club de Encuentro Manuel Broseta.

Los representantes de los trabajadores y de las empresas valencianas constataron, a pesar de sus diferencias, la buena sintonía entre los agentes sociales. Con todo, no coincidieron sobre los efectos de la Reforma Laboral. Según los sindicatos «ni ha contribuido a generar empleo ni a aumentar la productividad2, comentó Sáez. UGT y CCOO-PV lamentaron que el Congreso no tenga mayoría en el Congreso para derogarla.

Según Navarro, la citada reforma del mercado de trabajo contribuyó a salvar empresas y puestos de trabajo. «Sirvió para taponar la sangría de cierres de compañías a través de un proceso de flexibilización de plantillas, la misma que la de los países de nuestro entorno», apuntó. «Era necesaria2, indicó.

Para Sáez la reforma laboral pretendió «competir vía salarios y no mejoró la competitividad de las empresas. Tampoco ha desaparecido la precariedad laboral por las elevadas modalidades de contratos». En parecidos términos, el dirigente de CC OO indicó que «no es posible que existan tantas empresas en pérdidas como dice la patronal» para justificar los cambios en las normas laborales. Dijo que hay demasiadas horas extraordinarias que se pagan en B y hay fraude fiscal. «Tenemos unos gravísimos problemas de desigualdad social. Hay que redistribuir la riqueza de los trabajadores es el acto de patriotismo más grande», agregó León.

Las centrales sindicales apostaron por la preeminencia del convenio sectorial sobre el de empresa, la ultraactividad de la negociación colectiva (es decir, que los convenios sigan aplicándose automáticamente aunque hubiese pasado la vigencia del pacto laboral), así como el registro horario. Estos temas alejan a ambas partes en las mesas de negociación.

Según Navarro siempre es mejor «pacto que ruptura. Estoy convencido que la modernización de las relaciones laborales es clave y deberíamos dedicar más tiempo porque la concertación ha sido clave para salir de la crisis hace diez años». Respecto a las diferencias, en el caso del salario mínimo interprofesional (subirá a 900 euros) no coincidieron. «No se ha hecho con diálogo social y el 40% de las empresas todavía están en pérdidas», afirmó Navarro para rebatir a León sobre la solvencia de las mercantiles.

Según los sindicatos, los Presupuestos Generales del Estado de 2019 son más sociales y expansivos, pero lamentaron el recorte de 6.000 millones de euros que propicio la mayoría del Senado. «Hay que se más sagaces en los ingresos y no se pueden rebajar los impuestos», indicaron UGT y CC OO. Afirmaron que la Comunitat Valenciana se ha visto beneficiada aunque no recojan el cambio del modelo de financiación. Navarro dijo que son «optimistas» y que la economia entra en ralentización en Europa, lo que afectara a la vía de los ingresos. En infraestructuras han mejorado, agregó Navarro. Y dijo que la financiación autonómica ha sido al fracaso de este Gobierno.

Al acto acudieron los consellers de Economía, Rafal Climent, así como la de Justicia, Gabriela Bravo, así como el senador Joan Lerma, la vicealcaldesa de València, Sandra Gómez, la secretaria autonómica de Economía, Mako Mira y la directora general de Formación, Rocío Briones, entre otros altos cargos del Consell.