Las operaciones de renting y leasing -este último permite la posibilidad de adquisición a la finalización del contrato de alquiler, a diferencia del primero- aumentaron el año pasado en la Comunitat Valenciana en un 22 %, según explicó a este diario Manuel García, secretario general de la Asociación Española de Leasing y Renting. Por volumen, se produjo un descenso del 3,31 %, de 614 a 594 millones de euros, pero esa caída obedeció a una operación con un establecimiento hotelero alicantino en 2017 que trastocó los datos. De hecho, la bajada en Alicante fue de 201 a 154 millones en un año, mientras que en Castelló subía de 81 a 89 y en València, de 331 a 350.

García aseguró que el incremento en operaciones se debe a la mayor confianza en la economía, el aumento del consumo y el menor paro. Las actividades que más están notando ese repunte son el automóvil, la maquinaria (incluidos los equipos médicos) y las nuevas tecnologías. El secretario general de la citada asociación afirmó que la perspectiva para este año es de crecer por encima del 10 %. A este respecto recordó que el sector lleva cuatro ejercicios al alza pero todavía no ha llegado a los niveles que tenía antes de 2008, cuando se inició la crisis. García, por otro lado, indicó que no hay una singularidad valenciana, ya que se encuentra en la media nacional de una operación de leasing por cada cuatro de renting. Ahora bien, España sí está lejos de la media europea, donde por cada cuatro se formalizan tres bajo esta fórmula.