Un total de 17 empresas se hicieron socias capitalistas el año pasado de Caixa Popular. La cooperativa de crédito valenciana precisaba ampliar capital para su expansión, dado que la aportación de su beneficio -unos 6 millones de un total bruto de 12 el año pasado- no era suficiente. Y su llamada a las mercantiles ha resultado todo un éxito, según expuso ayer su director general, Rosendo Ortí, durante un encuentro con los medios de comunicación organizado por la Fundación de Estudios Bursátiles y Financieros. La política de captación de este tipo de socios se inició el año pasado a una media de 250.000 euros por compañía y la respuesta ha sido «tan buena que tenemos un listado de empresas que están interesadas en entrar en nuestro capital», afirmó Ortí. La rentabilidad se sitúa en el 3,07 %, muy por encima de la que se obtiene en otros segmentos del mercado.

El director general de Caixa Popular explicó que la entidad va a proseguir este año con su prudente expansión territorial. Tras la apertura de una sucursal en Villena -la tercera de Alicante tras Alcoi e Ibi-, la cooperativa cuenta con 71 oficinas. Las 68 restantes se encuentran en València. Para el próximo abril la cooperativa tiene previsto abrir un establecimiento en Tavernes de la Valldigna. Las aperturas suelen producirse a un ritmo de dos por año, aunque, en función de los resultados, esa cifra puede aumentar.

Oficinas

Caixa Popular, según explicó Ortí, analizará en el segundo semestre del año la posibilidad de quedarse con alguna de las 81 oficinas que CaixaBank ha anunciado que cerrará en la Comunitat Valenciana. El ejecutivo anunció, por otro lado, la suspensión al menos temporal de su expansión por Alicante en espera de cómo ejecuta su plan de mayor implantación en ese territorio la Caja Rural Central de Orihuela.

El director general de la cooperativa de crédito, que descartó fusiones en el sector, explicó que uno de los factores del crecimiento del 20 % en los beneficios de 2018 -10,1 millones libres de impuestos- fue el aumento en un 15 % de la inversión crediticia neta. La entidad no puede superar el 5 % del total en el sector promotor e inmobiliario, así que dirige sus objetivos de negocio hacia otros segmentos, singularmente la empresas. El año pasado abrió una división -Agro Caixa Popular- para entrar en el sector agrario, donde en solo doce meses -incluida la apertura de una sucursal en Requena- los resultados están siendo positivos, según Ortí, quien destacó la penetración conseguida en agroseguros y la labor comercial entre cooperativas y agricultores de las zonas donde están ubicados. Un objetivo para este año es «convertirnos en el banco de las farmacias valencianas».