Los dirigentes de Ford Almussafes y de UGT, sindicato mayoritario en el comité de empresa de la planta valenciana, alcanzaron ayer un acuerdo sobre el expediente de regulación temporal de empleo (ERTE). Afectará a unos 6.000 empleados de la líneas de producción de vehículos y motores durante seis días; en concreto el 15 de marzo, la semana del 1 de mayo, así como el 31 de ese mes.

La convocatoria de este nuevo ERTE, según los sindicatos, abre las puertas a que la multinacional del óvalo azul presente nuevos paros durante el segundo semestre de 2019. Una decisión que se tomará en función de la evolución del mercado de ventas en Europa, el principal destino de los vehículos fabricados en Almussafes. Las ventas de Ford en el conjunto del viejo continente se situaron en 1,5 millones de unidades durante el año pasado, un 3,5% menos en comparación con las entregas contabilizadas en el ejercicio precedente

La comisión negociadora del ERTE acordó aplicar en este ajuste las mismas condiciones que en el anterior, que tuvo lugar en los primeros meses de 2019. La empresa complementará las prestaciones públicas (pagadas por el Servicio Público Estatal de Empleo) hasta el 80 % del salario bruto y 100 % de antigüedad y pagas extraordinarias.

Según reconoció la sección sindical de UGT-PV, cuyo secretario general es Carlos Faubel, el acuerdo ha sido aceptado únicamente por esta central y será refrendado el próximo lunes en una reunión del comité de empresa.

Rechazo de STM y CC OO

STM-Intersindical rechaza este nuevo ERTE porque «no se complementa el 100 % del salario de las personas afectadas por este expediente». Según Paco González, secretario de acción sindical de STM-Intersindical, «no es entendible que la compañía aplique este nuevo expediente de regulación de empleo tras los multimillonarios beneficios en Almussafes y Europa».

Por su parte, la sección sindical de CC OO de la planta valenciana rechazó firmar esta nueva regulación de empleo porque no hay garantías de estabilidad laboral. Y la otra central del comité, CGT propuso que se baje la velocidad de la líneas de producción en lugar de ampliar el expediente de regulación de empleo.