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Los trabajadores valencianos padecieron en 2018 el mayor descenso de salarios

Cobraron de media 1.781 euros, con una caída del 1,6 % que contrasta con el alza en casi un punto del conjunto de España

Si los salarios son un síntoma de la mayor o menor productividad de un territorio y de la salud de su sistema económico, la Comunitat Valenciana tiene un serio problema. Y es que los sueldos medios de sus trabajadores se situaron al finalizar 2018 en los 1.781 euros, según la Encuesta Trimestral de Coste Laboral publicada ayer por el Instituto Nacional de Estadística. Solo andaluces, canarios y extremeños tenían una remuneración inferior. La media estatal se situó en los 2.039 euros, es decir unos 260 por encima de la Comunitat Valenciana. Es una distancia, además, que se agrandó el año pasado, dado que, mientras que en España los salarios subieron en nueve décimas, en la autonomía se redujeron en un 1,6 %, solo una décima por debajo del 1,7 % de Castilla-La Mancha. Solo en Andalucía, Asturias, Galicia y La Rioja también se registraron descensos.

Los salarios son la parte del león de los costes laborales, dado que en estos se incluyen otros conceptos como las cotizaciones a la Seguridad Social o las indemnizaciones. Los de la Comunitat Valenciana se situaron el año pasado en los 2.371 euros, solo por encima de los de Andalucía, Canarias y Extremadura. La media nacional fue de 2.692. Creció nueve décimas. Los costes laborales valencianos, por contra, experimentaron el mayor descenso de toda España, con un 1,6 %.

Sectores

La especialización económica de un territorio es determinante a la hora de distribuir la riqueza entre sus trabajadores en forma de salarios. Una economía con predominio de los servicios poco cualificados, como los relacionados con el turismo, por ejemplo, tenderá a abonar remuneraciones más bajas que otra zona donde tengan mayor peso específico las actividades con mayor valor añadido. No es nada nuevo y explica por qué la Comunitat Valenciana está en la zona baja del escalafón y el País Vasco (2.438 euros) y Madrid (2.436) ocupan las dos primeras posiciones.

En España, las actividades de suministro de energía, con casi 6.000 euros, son las que tienen los costes laborales más elevados, seguidas por las financieras, con casi 5.000. La tercera plaza corresponde a los empleados en empresas de información y comunicación, con 3.916 euros. Por contra, el último lugar en este ranking lo ocupa la hostelería, con 1.636 euros. Muy cerca están las actividades administrativas (1.841) y las artísticas (1.908).

La tasa de variación la encabezaron dos de las ramas con mayores costes laborales: suministro de energía, con un incremento del 3,9 %, e información y comunicaciones (3,6 %). Solo hubo tres en las que se registraron descensos. Fueron en actividades sanitarias (0,2 %), educación (1,6 %) e industrias extractivas (2,7 %).

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