La avalancha de proyectos de parques solares en la Comunitat Valenciana ha colapsado la capacidad de la red de distribución eléctrica. El problema es que varios operadores han presentado a la vez propuestas de parques fotovoltaicos en las mismas zonas y Red Eléctrica de España (REE) no tiene capacidad para atender todas las conexiones, según confirmaron fuentes de la patronal valenciana de empresas de energías renovables (Avaesen). La Generalitat Valenciana ha decidido nombrar interlocutores únicos de las empresas por zonas para agilizar con REE las conexiones, según confirmó la secretaria autonómica de la Conselleria de Economía, Blanca Marín. La Generalitat ha copiado el modelo que funciona con éxito en Aragón a la espera de que la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) le dé unas directrices claras (Economía lleva desde el 15 de enero esperando una respuesta).
El Consell está tramitando la concesión de licencias para construir parques de energías renovables (fotovoltaica y eólica) con una potencia de 5.000 megavatios (MW). La cifra supone triplicar la potencia actual de energías renovables de la Comunitat Valenciana, puesto que en estos momentos hay instalados 1.200 MW de energía eólica y 350 MW de fotovoltaica. La mayoría de los proyectos son para parques solares. La intención del Consell es conceder los permisos entre 2019 y 2020.
La demanda para instalar parques solares ha aumentado mucho en el último año tras el fin de las prórrogas a las empresas que tenían concesiones para desarrollar este tipo de plantas. El interés en construir parques de aerogeneradores no es alto porque en la C. Valenciana no hay tanto recurso eólico como en otras zonas de España como Aragón.
Marcos J. Lacruz (presidente de la patronal valenciana de energías renovables) destacó que los proyectos que tramita el Consell suponen «una inversión de 5.000 millones de euros y la creación de 3.000 puestos de trabajo». Lacruz aseguró que «el potencial de la Comunitat Valenciana es mayor por el plan de sostenibilidad presentado por el Gobierno a Bruselas que conlleva la instalación de 80.000 MW de potencia en toda España antes de 2030». El compromiso del Gobierno implica que en 2030 el 74 % de la energía producida en España proceda de fuentes renovables.
La Generalitat ha eliminado algunas trabas burocráticas para que sea más rápido construir un parque fotovoltaico. En algunos casos ya no hace falta la Declaración de Interés Comunitario que alargaba hasta dos años el plazo para obtener la licencia.
Trabas del anterior Gobierno
El problema de la eclosión de proyectos tras años de parálisis por las trabas del anterior Gobierno del Partido Popular es que la red no está preparada para hacer frente a la nueva oferta. La Conselleria de Economía pidió a REE que agilizara las conexiones y comprobó que la operadora no puede ir más rápido, porque no tiene un interlocutor empresarial único en cada zona.
Blanca Marín precisó que el colapso no se produce en todas las zonas. «Hay algunas áreas en las que solo está promoviendo el parque una empresa, pero en otras como en Ayora hay problemas», señaló. La secretaria autonómica añadió que hasta ahora, en caso de exceso de demanda, Red Eléctrica de España optaba por asignar el caudal de red de forma proporcional entre todos los solicitantes.
