La Audiencia Nacional ha condenado al ex consejero delegado de Banco de Valencia Domingo Parra a cuatro años de prisión por un delito continuado de administración desleal en varias macrooperaciones urbanísticas financiadas por la entidad que causaron un perjuicio superior a los 160 millones de euros. La más relevante de ellas es la conocida como Nou Litoral

En la sentencia, la sección primera de la sala de lo Penal ha impuesto también una pena de seis meses de cárcel al que fuera director de participaciones de inmobiliaria, Alfonso Monferrer, cuatro meses de cárcel para los empresarios Salvador Vila y Juan Bautista Soler, en tanto que absuelve al notario Carlos Pascual, Fernando Polanco y Teresa Villalba.

La causa parte de la querella interpuesta en 2013 por el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), cuyos intereses defiende el abogado Carlos Gómez-Jara, en la que se alegaba que la "conducta abusiva" con la que Parra buscaba obtener un "lucro ilícito" a favor de sus socios, le había supuesto al organismo un agujero de 160,5 millones de euros.

Es la segunda vez que la Audiencia Nacional se pronuncia en contra del ex consejero delegado de Banco de Valencia, que el pasado febrero fue condenado a un año y siete meses de cárcel por administración desleal en préstamos a la sociedad Pegoliva, la cual le era afín tanto económica como personalmente.

En el caso de Nou Litoral, participaron las empresas de Vila y Soler, utilizando los fondos para la compra de suelo en Vergel (Alicante), Campanar y Pinedo (Valencia), además de 224 fincas rústicas en La Reva (Chiva) a Llanera Urbanismos Inmobiliaria, todavía en 2006. Con los impagos el Banco de Valencia perdió 83,25 millones.

Vinculada a la anterior, en 2008 y 2010 la sociedad participada por el banco Valenciana de Viviendas 2010 adquirió a Soler y Vila fincas en Vergel, Patraix, Mislata, Xàbia y Alzira que habían sido hipotecadas como garantía de los préstamos y se subrogó en la deuda. El perjuicio hoy se cifra en 47,4 millones.

Pascual, Polanco y Villalba están relacionados con Faverch Desarrollos. A través de esta sociedad, dividida al 50% entre el matrimonio Polanco Villalba y el notario, en 2007 adquirieron 224 fincas de suelo rústico en La Reva también a Llanera, como Vila y Soler. Los impagos y novaciones se sucedieron hasta estimarse un perjuicio de 29,8 millones al Banco de Valencia.