Un fantasma va a sobrevolar la relación entre las ITV y la Generalitat esta legislatura: el fin de la concesión de 25 años que expira el 31 de diciembre de 2022. Las empresas han tratado sin éxito de prorrogar este servicio dentro del pleito mantenido con el Consell y por el que reclaman una cantidad millonaria tras la sentencia que anuló una bajada de tarifas. La predisposición de la Generalitat a revertir o mantener este servicio en manos privadas podría variar en función de quién asuma esta competencia, si Compromís o PSPV.