La Fiscalía Anticorrupción ha pedido al juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón que cite a declarar como investigado al multimillonario ruso Mikhail Fridman, dueño de la cadena de supermercados Dia, por liderar una serie de actuaciones para aprovecharse de la situación de quiebra de la empresa española Zed WorlWide y adquirirla por 20 millones de euros, «un precio irrisorio».

El fiscal José Grinda ha remitido un escrito al titular del Juzgado Central de Instrucción número 6, en el que explica que Fridman, máximo accionista de la cadena de supermercados Dia, «tiene el control de los acontecimientos, que junto con la conducta de otros investigados, derivaron en la insolvencia de Zed WordWide», que presidía Javier Pérez-Dolset.

El representante del Ministerio Público considera que la finalidad de las decisiones de Fridman era «el apoderamiento total de una compañía mediante un procedimiento complejo que se vale de actuaciones de distinta intensidad, ejecutadas en diversas líneas y que culmina con una situación de bloqueo institucional y económico de la compañía (insolvencia), para adquirirla a un precio irrisorio muy inferior al de mercado».

El escrito apunta que del análisis de toda la información conseguida a lo largo de esta instrucción cabe deducir que el inversor ruso lideró «una práctica que se conoce en el entorno criminal ruso como raider (asalto o ataque) o absorción ilegal de empresas».