El peso de las grandes empresas en el empleo es un 20 % inferior a la media nacional en la Comunitat Valenciana y, sin embargo, las microempresas son la que más empleo generan, dos puntos más que en España. Según el Foco AVE, que en su última edición analiza cómo el menor tamaño empresarial contribuye a una menor productividad, en la autonomía solo uno de cada cuatro empleados trabaja en empresas medianas o grandes, y es en servicios donde mayor es la diferencia de tamaño entre la Comunitat Valenciana y la media nacional.

La menor dimensión media de la empresa valenciana también se ve reflejada en el número de empleados por empresa, un 7 % inferior. En el caso de la inversión en innovación, disponer de un departamento de I+D+i exige un umbral mínimo de tamaño en la empresa, y en cuanto al acceso a la financiación, las condiciones son mejores conforme aumenta el tamaño de la empresa.

La internacionalización de una empresa y la cualificación de los directivos son factores que también afectan de forma positiva a la competitividad. Por ello, una vía para reducir la brecha de competitividad de la Comunitat Valenciana respecto a la media nacional -más aún a las regiones líderes- es aumentar la dimensión media de las empresas, según este informe de la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE) y el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (IVIE).

Concentración

Según datos de 2018, las grandes empresas (250 empleados o más) concentran el 10,7 % del empleo en la Comunitat Valenciana, 2,7 puntos porcentuales menos que la media nacional, un menor peso que se agudiza si se compara con Madrid, País Vasco, Navarra y Cataluña. Sin embargo, las empresas de menos de 10 empleados son las que más empleo generan, el 45,5 %, lo que supone 2,2 puntos más que en España.

También es grande la diferencia de tamaño en empresas con asalariados, un 12 % inferior a España, y destaca el menor tamaño en el sector de la energía (un 28 % menor) y los servicios (14 %). Por contra, las empresas de mayor dimensión son las de fabricación de productos de caucho y plásticos y de otros productos minerales no metálicos (aquí se incluyen las empresas de cerámica, con un número de empleados por empresa un 55 % mayor), y la industria textil, confección de prendas de vestir e industria del cuero y del calzado, con un 30 % superior. Le sigue la industria de la madera y del corcho, industria del papel y artes gráficas, con un 16 %. En servicios, solo destaca el transporte y almacenamiento (7 %), y en comercio es similar a la media nacional.