Que el Brexit, como ahora parece, se vaya a consumar de forma amistosa, es una buena noticia para la Comunitat Valenciana, a pesar de que, en principio, la salida del Reino Unido de la Unión Europea no da precisamente para expresar enhorabuenas. Y es que uno de cada cinco euros de inversión directa que la autonomía ha recibido en los años de la recuperación económica procedía de la Gran Bretaña, según los datos del V Barómetro sobre clima y perspectivas de la inversión británica en España, elaborado por Analistas Financieros Internacionales (AFI) y la Cámara de Comercio Británica en España.
Así, entre 2014 y el primer semestre de 2019, el capital británico invertido en la Comunitat Valenciana ascendió a 715 millones de euros, una cantidad equivalente al 19,4 % de toda la inversión recibida por la autonomía en dicho período. El barómetro precisa que en 2018 ese porcentaje llegó a superar el 30 %. Así las cosas, la autonomía se ha convertido desde que terminó la crisis en una de las regiones españolas más dependientes de los inversores del Reino Unido.
Los 8.009 millones de Madrid equivalen al 8,1 % de lo que entra en la autonomía que alberga la capital española. En Cataluña, los 1.122 millones representan el 4,6 % del total. En Andalucía, el capital invertido es de 354 millones (el 14,3 %) y en Aragón, 46,4 (5,9 %). Baleares se queda en 377 millones (22,2 %).
Por encima de la Comunitat Valenciana, en volumen, figura Castilla y León. En esa autonomía se han invertido desde 2014 1.680 millones de euros desde el Reino Unido, el 81,8 % del total recibido. No obstante, hay que dejar constancia de que la inmensa mayoría de ese dinero, en concreto 1.648 millones, corresponde al primer semestre de 2019 y ha ido a parar a su industria papelera.
Dato excepcional
Se trata de un dato, en consecuencia, más bien excepcional, sobre todo si tomamos en consideración que está por encima del de Madrid, que en los seis primeros meses de 2019 recibió 1.257 millones, la mitad de los cuales, más o menos, fueron al sector de la publicidad. Otros 400 se quedaron en la educación. Ya a una distancia sideral de las dos aparece Cataluña, donde el capital británico invirtió hasta 52,4 millones. Casi 20 de esa cantidad fue a almacenamiento y actividades anexas del transporte. A continuación figura la Comunitat Valenciana, con 35,6 millones.
El barómetro no aporta en este caso, al igual que en el resto, comparativa alguna con el mismo período del año anterior. Unos 28 de los citados 35 millones se quedaron en el sector de la fabricación de productos de caucho y plástico. Unos 2,5 fueron a servicios de alojamiento. Unos 2 a actividades auxiliares de los servicios financieros, una cantidad similar para actividades deportivas y una cifra más bien testimonial para comercio minorista. Baleares se quedó en 19,2 millones y Andalucía, en 6,7.
La suma de lo destinado a esas seis autonomías alcanza los 3.125 millones, con un incremento de casi el 80 % respecto al primer semestre del año pasado y permiten al Reino Unido mantenerse como primer inversor en España entre enero y junio de 2019, a pesar de la incertidumbre política y del Brexit.
El citado barómetro ofrece datos también de los flujos de inversión británica per cápita, en este caso en el período comprendido entre 2013 y 2018. En la Comunitat Valenciana, la cifra es de 145 euros por persona. Por encima están Madrid (1.233), País Vasco (821), Castilla y León (689), Baleares (327) y Cataluña (150).
