Cosas de la globalización. Unos problemas de logística de Ford en Sudáfrica pueden dejar sin renovar la flota de vehículos de las unidades de Protección Civil de municipios del interior de la Comunitat Valenciana. Ese es el imprevisto que estos días trae de cabeza a algunos funcionarios de Emergencias de la Generalitat, que ven cómo por diversos retrasos pueden ver perder parte del crédito previsto para este año destinado a la adquisición de material rodante.
El departamento adscrito a la Conselleria de Justicia lleva tiempo con el objetivo de dotar de nuevos medios materiales a las asociaciones de Protección Civil especializadas en una respuesta rápida a los incendios forestales. Se trata de grupos que hacen un buen servicio en zonas de interfaz entre las ciudades y el entorno rural, en áreas como Alcoi, Enguera, Ayora o puntos de la comarca de la Marina. Pese a no ser profesionales, se trata de agrupaciones muy capacitadas para realizar pequeñas intervenciones con agilidad, en conatos de incendios, por ejemplo, mientras se activan las brigadas forestales profesionales.
Emergencias de la Generalitat, en este contexto, había presupuestado para este año una partida para adquirir cuatro vehículos tipo pick up y transformarlos con un carrozado específico para poder incorporar una cubeta de agua y espacio para otros útiles.
Por las prestaciones de los modelos que ofrece el mercado, la Generalitat recurrió a la multinacional americana Ford, concretamente por su modelo Ranger, en una apuesta además por colaborar con una gran compañía generadora de empleo y actividad en València, y con la que esta administración mantiene una relación muy fluida.
El modelo no se fabrica aquí, sino en Sudáfrica, y pese a tener la petición tramitada al menos desde finales el verano, según ha sabido este diario, diciembre está a punto de echarse encima y la administración aún no ha recibido los vehículos, con el consiguiente cabreo en Emergencias.
Fuentes conocedores del episodio apuntan que la compañía estadounidense ha alegado problemas logísticos al tratarse de unos vehículos que se fabrican en Sudáfrica, lo que puede complicar el transporte hacia Europa. Emergencias contaba con tenerlos este mes, para poder facturarlos con el crédito retenido para este ejercicio, y que se pierde en caso de no utilizarse.
Problemas con el barco
No es un inconveniente menor. El dinero presupuestado por las administraciones no se acumula de un año para otro, así que si no se gasta esa partida en su totalidad habría que afrontar el encargo con fondos del presupuesto de 2020, lo que impediría que el próximo ejercicio pudiera realizarse otra compra similar. La agencia del 112 tiene localizada una veintena de agrupaciones de Protección Civil a las que pretende reforzar con este tipo de vehículos.
Así, de los cuatro coches pedidos, tres llegarán a mediados de diciembre, si no hay problemas aduaneros, prácticamente fuera del plazo fijado por el Servicio de Contratación para poder facturarlo con el crédito disponible para este año. Sin embargo, el otro vehículo no llegará hasta febrero de 2020, en el siguiente barco que llegue desde Sudáfrica. Así, tanto el cuarto vehículo como el carrozado de los cuatro deberán facturarse ya con cargo al presupuesto de 2020.
