El Consell ha rebajado a la mitad el plazo para instalar plantas de grandes dimensiones en la Comunitat Valenciana. El tripartito (formado por PSPV, Compromís y Podemos) ha introducido una enmienda que elimina el requisito del informe de interés comunitario que emite la Conselleria de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio. La medida implica reducir de tres años a un año y medio el tiempo necesario para obtener la licencia, según subrayó Marcos J. Lacruz, presidente de la patronal valenciana de energías renovables (Avaesen). Los parques de menos de cinco megavatios ya estaban exentos del informe favorable.
La decisión del Consell es clave en un momento en el que los promotores de parques fotovoltaicos han depositado avales por valor de 600 millones de euros para hacer frente al desarrollo de 15.000 megavatios de potencia. La petición de proyectos implica una inversión de 13.000 millones de euros, aunque no todos los parques saldrán adelante por la falta de capacidad de las redes de distribución y transporte de Red Eléctrica de España.
Marcos J. Lacruz insistió en que es esencial rebajar los plazos de los permisos para no perder la ventana de oportunidad que se ha abierto en España por los compromisos para reducir las emisiones contaminantes. Los promotores deben superar un triple filtro ya que necesitan los permisos de las consellerias de Medio Ambiente, Economía y Territorio.
Los trámites en las tres consellerias implicadas se realizan de forma paralela, pero el tapón se produce en la de Territorio por la declaración de interés comunitario en suelo no urbanizable común, que los promotores llevan años denunciado que es algo «innecesario». Los empresas que promueven este tipo de parques entienden que la Conselleria de Territorio solo debería intervenir en los casos en los que los parques puedan afectar a una zona arqueológica ya que para el resto de espacios protegidos pasan la supervisión de la Conselleria de Medio Ambiente. «Es lo que ocurre en el resto de comunidades», advierten los empresarios.
Marcos J. Lacruz insistió en que es necesario agilizar las licencias para aumentar el peso de la energía renovable en la Comunitat Valenciana (que es uno de los compromisos del Consell). Lacruz advirtió que solo un 20 % de la energía de la C. Valenciana es renovable frente a otras regiones españolas que producen el doble.
En el actual boom de proyectos (los empresarios evitan hablar de burbuja) han confluido el desplome del precio de las placas solares (el coste ha bajado un 50 % en los últimos cinco años), el incremento de la financiación bancaria y los planes del Gobierno para que en el año 2030 el 74 % de la energía producida en España provenga de fuentes renovables para cumplir los compromisos de reducción de emisiones de CO2.
El plan estratégico de Red Eléctrica de España prevé la inversión a nivel nacional de 1.500 millones de euros en los próximos cinco años para permitir la penetración de las renovables. En los últimos meses, Red Eléctrica de España (que es el operador del sistema) ha concedido permisos en la Comunitat Valenciana para conectar plantas fotovoltaicas con una potencia de 4.560 megavatios. Sin embargo, también se ha visto obligada a denegar permisos porque se ha sobrepasado la capacidad del punto de conexión. La patronal lamenta que se están denegando una de cada tres peticiones.
Un segundo problema al que se están enfrentando las empresas valencianas de parques solares es la falta de personal en la Generalitat, que está retrasando la tramitación de proyectos.
