Llega la hora de la verdad para la factoría valenciana de Ford. Después de un 2019 de inversiones y preparativos para el lanzamiento del nuevo Kuga, la planta recupera hoy la actividad tras el parón navideño y después del último expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) con toda la atención en la nueva generación de su modelo estrella. De la buena marcha en el mercado del Kuga depende la estabilidad de una factoría que tiene en este modelo prácticamente la mitad de su carga de trabajo.

A partir de este mes de enero se inicia la curva de lanzamiento del nuevo modelo. Arrancará con unas cien unidades diarias y la fase de aceleración le llevará hasta llegar a unos 950 al final de primer trimestre, según anunció este pasado diciembre el director de Fabricación, Dionisio Campos.

El propio responsable descartó que fuera a haber recortes de empleo a corto plazo, pero en la plantilla prefieren evitar el triunfalismo en un momento de grandes incertidumbres no solo en Ford sino en todo el sector de la automoción.

«Lo mejor sería que aumentara la producción y no tuviéramos ningún problema. Mucho me temo que no será así. La producción en el mejor de los casos se mantendrá, si no es que baja, y además tenemos mucho empleo que se originó por puestos especiales ligados al lanzamiento del nuevo Kuga. A final del primer trimestre tendremos que sentarnos y analizar la situación del empleo en la fábrica», argumenta el presidente del comité de empresa, Carlos Faubel, en declaraciones a la Cadena Ser. Y es que la puesta en marcha del nuevo modelo permitió recolocar a mucho personal.

Cabe destacar que el año 2019, pese a que la planta valenciana no ha sufrido ningún impacto directo (a diferencia de otros mercados como Reino Unido, Francia o Alemania, con cierres de fábricas o pérdida de empleo), sí que ha dejado entrever que el futuro a medio plazo no está precisamente despejado.

Así, a partir de 2021 se perderá una parte importante de la producción de la furgoneta comercial, el segundo vehículo por carga de trabajo tras el Kuga. Las unidades para el mercado americano pasarán a fabricarse en Mexico. Por otro lado, la compañía también ha anunciado que a partir de 2022 Norteamérica comenzará a fabricar los dos únicos motores que ahora mismo tiene Almussafes, lo que ensombrece el futuro de esta planta.

En este contexto, la segunda quincena de enero visitará Almussafes el presidente de Ford Europa,Stuart Rowley, y el comité de empresa aprovechará para reivindicar la planta y mayor carga de trabajo, con la vista puesta en recibir algún motor híbrido.