«Muy buena sintonía y ausencia de críticas». Con estas palabras definió ayer el presidente de la Cámara de Comercio de València, José Vicente Morata, la comida que la ministra de Industria, Reyes Maroto, compartió ayer con empresas como Mercadona, Consum, Boluda, Dacsa, Cotoblau, Helados Estiu, Istobal, Micuna, Power Electronics, Stadler, S2 Grupo o Vicky Foods.

Según Morata, durante la reunión, a la que no tuvieron acceso los medios de comunicación, los empresarios plantearon la necesidad de la unidad de mercado en España -«que no haya regulaciones como si hubiera 17 países»- y que no se permita una competencia desleal entre autonomías, por ejemplo con las subvenciones, como sucede con País Vasco y Navarra. La ministra, según el presidente cameral, coincidió con los empresarios en la necesidad de una mayor presencia internacional y en que Estados Unidos debe ser el mercado clave. También alabó las políticas turísticas que se desarrollan en la Comunitat Valenciana y abogó por el apoyo al pequeño comercio «por ser el sostén de nuestras ciudades».

A primera hora de la mañana, la ministra de Industria, Comercio y Turismo visitó la feria Cevisama, donde se comprometió a «reactivar muy pronto» una mesa de trabajo con los fabricantes de azulejos y productos cerámicos para diseñar «una hoja de ruta a medio y largo plazo» que incluya sus reivindicaciones, entre ellas, un Pacto de Estado por la Industria del que habló el presidente de la patronal Ascer el martes ante la prensa internacional. Vicente Nomdedeu, tras reunirse con Maroto, deslizó que dicha mesa podría constituirse en abril, según Europa Press. Tras esta visita, la ministra se reunió con el jefe del Consell, Ximo Puig.