El envejecimiento de la población y las cada vez mayores posibilidades de tratamiento de un buen número de enfermedades han convertido al sector sociosanitario en uno de los mayor crecimiento de los últimos años y también en uno de los que presentan mejores perspectivas de cara al futuro. Los movimientos en el sector son constantes y casi todas las compañías del ramo tienen en cartera importantes planes de inversión, para aprovechar las oportunidades de un mercado que no deja de expandirse. Es el caso del alicantino Grupo Casaverde, que tiene previsto destinar alrededor de 80 millones de euros en los próximos cuatro años para duplicar su actual red de centros, según confirmó a este diario su presidente, Alberto Giménez.

Los primeros pasos de esta expansión se producirán en apenas unos meses, cuando el grupo tiene previsto inaugurar en Catral la que será su séptima residencias para mayores, que sumará unas 200 camas a las 700 que ya tiene repartidas en el resto de sus centros, tanto en la provincia de Alicante, como en Madrid.

Además, la compañía también ha iniciado ya la construcción de otra residencia en Murcia, que abrirá entre este año y el que viene. Pero los proyectos van más allá, y la firma busca emplazamiento para otros tres establecimientos en Madrid, Extremadura y Castilla y León.

En la misma línea, Casaverde pondrá en marcha nuevos hospitales especializados en rehabilitación neurológica, como los tres que ya tiene en funcionamiento en Mutxamel, Mérida y Navalcarnero, en Madrid; a los que hay que sumar tres clínicas ambulatorias en Alicante, Badajoz y Murcia.

Grupo Casaverde cerró el pasado ejercicio con una facturación de 23 millones de euros. Además de las seis residencias para mayores, los tres hospitales y las tres clínicas ambulatorias, también forma parte del grupo las fundaciones Economía y Salud, entre otras.