La buena marcha del sector turístico en 2018 permitió a la compañía alicantina de alquiler de vehículos sin conductor Goldcar cerrar un buen ejercicio, aunque no todos sus mercados le funcionaron igual. Mientras la principal firma del grupo y la responsable de la mayor parte del negocio en España, Goldcar Spain, ganó de más de 14 millones de euros, varias de las filiales que tiene repartidas por Europa registraron números rojos, ya sea como consecuencia de la inversión para introducirse en estos mercados o por otros motivos.

Así, según las cuentas oficiales depositadas por Goldcar Spain y su sociedad matriz, Car Rentals Subsidary -que, a su vez, es propiedad última de la francesa Europcar desde diciembre de 2017-, además de la primera de estas compañías, también cosechó importantes ganancias la filial portuguesa del grupo, con más de 6,2 millones de beneficios. Algo lógico si se tiene en cuenta que la compañía es líder en este mercado, en el segmento de alquiler de vehículos «low cost», como también le ocurre en España. Junto a los anteriores, el otro destino donde la firma logró cerrar en positivo fue Grecia, donde ganó otro millón de euros, mejorando las cifras del año anterior.

Por el contrario, las pérdidas fueron la tónica en otros importantes mercados. En unos casos, unos números rojos justificados por el esfuerzo de hacerse un hueco en un nuevo destino, como es el caso la firma Oto Kiralama Ticaret, con la que empezó a operar en Turquía en 2017 y que se anotó 1,6 millones de pérdidas.

Desde que es propiedad de Europcar, ha dejado de presentar cuentas consolidadas, por lo que es imposible conocer su facturación global. La principal sociedad del grupo, Goldcar Spain, ingresó en 2018 más de 195 millones, lo que supuso una caída de un 5%. La disminución vino por el menor importe que ingresó con la venta de los vehículos que retira de su flota.