El número de trabajadores valencianos afectados por expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) alcanzó ayer la cifra de 210.942 personas tras la presentación de 36.710 casos por parte de empresas de la Comunitat en la Conselleria de Economía. Estos datos coresponden al período acumulado del 12 al 30 de marzo, según informa la Dirección General de Trabajo. El número de implicado vuelve dispararse, tal como ocurre en todas la autonomías y representa casi la mitad de los parados totales, que pasan de 366.262 (según los datos de febrero de Labora), a algo más de 576.000 desocupados.

Por provincias, la dirección territorial de València ha canalizado 17.538 expedientes para 87.824 trabajadores, frente a los 14.312 procedimientos y 71.312 empleados de Alicante y los 4.355 y 19.629, respectivamente, de Castelló.

Además, la dirección general tramita otros 331expedientes para 32.177 trabajadores que pertenecen a compañías con centros de trabajo repartidos en diferentes localidades de la autonomía.

Empresas del sector servicios, vinculadas a las restauración, hostelería y viajes, comercio, así como firman industriales colapsan estos días los servicios de la Dirección General de Trabajo, que ha reforzado su estructura con 30 funcionarios procedentes de diversas áreas del Servicio Valenciano de Empleo y Formación (Labora).

Sector marítimo

Mientras tanto, CC OO advierte de la petición de iniciación de procesos de ERTE en empresas del sector marítimo portuario, a pesar de haber sido considerado decisivo en la cadena logística, y de estar manteniendo exportaciones, importaciones y movimientos de mercancía, con un número de tráficos portuarios similares a periodos anteriores a la crisis y, en muchos casos, incluso con repunte de la actividad y de escalas.

Algunos de los expedientes de regulación de empleo presentados tienen carácter nacional en empresas Transitarías, de Tráfico Exterior muy importantes también en el ámbito local de los puertos de Valencia, Alicante y Castellón, Navieras de Cruceros y en empresas del sector de la pesca, cofradías de la Comunidad Valenciana, barcas de pesca, con una cascada de solicitudes de ERTE de fuerza mayor y de actividad, por la falta de seguridad y de demanda, según indica la patronal, de productos frescos y también, cabe recordar, algunos de los despidos que se han producido en empresas de acuicultura en la provincia de Valencia, el mismo día de la declaración del estado de alarma.

Comisiones Obreras es consciente de situación extrema gravedad que estamos viviendo, de las dificultades económicas, de la destrucción del empleo, de la necesidad de garantizar los salarios y la recuperación de la ocupación. Para ello, insta a utilizar todos los mecanismos legales disponibles, y apela a la responsabilidad empresarial para minimizar el impacto que puede suponer la aplicación de estas medidas.

El sindicato urge a actuar conjuntamente con solidaridad y concienciación, y para superar las adversidades que vamos a sufrir en los próximos meses, para que no se profundice la precariedad de las personas más vulnerables.