Antes del mediodía de ayer, desde Ontinyent, una furgoneta de la Generalitat salía hacia uno de los hospitales o residencias de mayores de la autonomía que necesitan abastecimiento continúo de material sanitario. Es el primer envío de la operación puesta en marcha por la Generalitat, el instituto tecnológico del textil Aitex y la patronal de este sector Ateval, para fabricar en tiempo récord seis millones de unidades con la participación de cinco empresas valencianas.
Este primer envío, desde las instalaciones de la firma del presidente del sector, Cotoblau, incluía 5.000 unidades y una pegatina en cada caja: «Mascaretes sanitàries 100% valencianes. Recolzant els nostres sanitaris i al nostre poble. Fet a València».
Tras semanas recibiendo material llegado de China en grandes cantidades, comienza a dar frutos la primera de las medidas de colaboración puestas en marcha por la Generalitat, a través del Ivace de la Conselleria de Economía, con el objetivo de reorientar la capacidad productiva de sectores tradicionales valencianos. El objetivo no es otro que reducir en la medida de lo posible la dependencia de productos sanitarios de otros mercados, básicamente China, lo que está provocando una batalla entre países por conseguir los productos más críticos (mascarillas, equipos de protección y respiradores para UCI), que hoy por hoy escasean en buena parte de los países afectados.
En este encargo de la Generalitat, están participando cinco empresas: Cotoblau, fabricante principalmente de sistemas de descanso, como fundas de colchón para Ikea; Marie Claire, líder español del segmento de pantis y medias; Rapife, de ropa interior; Euromoda, de ropa de cama, y Funcotex, de fundas de colchón.
Y, según apuntan desde la patronal, además de realizar una importante labor de asistencia, el encargo está siendo una bendición para el sector en un momento en que la actividad está paralizada: primero porque las cadenas o clientes a los que abastecen llevan días cerrados. Y desde este lunes, porque un decreto del Gobierno español les impide trabajar.
Con todo, la confección de textil sanitario es una de las excepciones para mantener la actividad y los encargos de la Generalitat están permitiendo rebajar el impacto del coronavirus. En este sentido, Marie Claire tenía previsto empezar ayer a fabricar entre 20.000 y 25.000 mascarillas homologadas para la Generalitat, que le iba a permitir mantener a alrededor de un centenar de profesionales entre las plantas de Vilafranca y Borriol, según el diario Mediterráneo.
En el caso de Cotoblau, la otra firma de tamaño considerable de este pool de empresas, ha podido rescatar del expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) al que había recurrido a unos 35 operarios gracias a este encargo. Según señala su propietario, Càndid Penalba, hay 45 trabajadores en tareas ligadas a las mascarillas, en tres turnos las 24 horas.
En su caso, Cotoblau cuenta con una línea de producto sanitario y eso le ha permitido mantener una parte de la empresa en funcionamiento pese al cese de la actividad generalizada de sus clientes. En este sentido, corrobora que la demanda de este tipo de producto, como las fundas para colchón sanitario y también las batas, han registrado un gran incremento, procedente tanto de países del exterior como de otras autonomías.
En este sentido, el dirigente patronal señala que, tras la puesta en marcha de esta mascarilla homologada por Aitex, otras comunidades están preguntando. De momento, toda la capacidad puesta en marcha para este proyecto se va a centrar en la demanda del sistema sanitario valenciano. Eso sí, empresas como la suya ya han recibido encargos o el interés de territorios como el País Vasco, la Rioja, Castilla la Mancha o Galicia, de momento para la confección de batas y fundas de colchón.
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