Muy poco a poco, y rodeado de mucha incertidumbre por las restricciones de los Estados, comienza a despejarse mínimamente el horizonte sobre el regreso de los vuelos internacionales a València. De momento, Manises ha conseguido sortear el decreto que, por unas horas, le inhabilitaba para recibir viajeros internacionales. Habrá vuelos desde y hacia el exterior pero de momento, y al igual que en el resto de España, todo pasajero que llegue deberá someterse a una cuarentena de dos semanas, lo que complica viajar por motivos de ocio, algo que, en todo caso, no está permitido en estos momentos.
Al margen de esto, las compañías comienzan a planificar sus rutas y València entra en los planes de las grandes aerolíneas. Una de las primeras rutas regulares que va a recuperarse es la que opera Swiss Air, del grupo Lufthansa, entre València y Zurich.
Desde el 1 de junio entra en funcionamiento una línea regular con cuatro vuelos semanales en cada dirección, informa la compañía.
Algo más se va a hacer esperar Ryanair, el principal operador del aeropuerto de València con más de un tercio de los pasajeros y una gran conectividad con toda Europa. Según la información que volcó ayer la irlandesa en su web, los vuelos, salvo nuevos impedimentos, regresan el 1 de julio.
No será una vuelta a pleno rendimiento, con menos frecuencias, que se reducirán ante un mercado bajo mínimos, ni con en la totalidad de sus rutas. En julio Ryanair operaría 44 de las 47 rutas que estaba previstas para esta temporada.
En concreto, se caen Fez, Burdeos y Toulouse, según la recopilación de la web Aeropuerto Valencia. Habrá que ver cómo evoluciona este primer mes para ver qué decide el grupo irlandés respecto a agosto. Cabe destacar que las programaciones están sujetas a la evolución de la pandemia y a una demanda que ofrece incertidumbre.
