El diputado del PP y portavoz en materia de Industria, Felipe Carrasco, reclamó ayer a la Generalitat actuaciones decididas para respaldar al sector del automóvil, precisamente en la semana en la que el Gobierno ha presentado un paquete de ayudas a los ciudadanos que adquieran vehículos. En concreto, Carrasco reclama un complemento autonómico para esas ayudas del plan renove de vehículos, similar al que en 2010 puso en marcha la Generalitat gobernada por el PP.

Del mismo modo, el diputado incidió en la disparidad de opiniones dentro del Consell respecto al motor. Se refería a la reivindicación del presidente Puig de que las ayudas del Estado lleguen a todo tipo de vehículos, incluidos diésel y gasolina, mientras la Conselleria de Transición Ecológica prepara un impuesto a los vehículos que generen emisiones.

Por otro lado, el representante popular recordó al Consell la situación en la que han quedado cientos de trabajadores de una contrata de Ford (Acciona) que perdieron sus empleos hace unos meses, lamentando que no se les haya dado una solución. «Hay 600 trabajadores más que a final de año estarán en la misma situación», señaló.

Climent: 118 millones en ayudas

El conseller de Economía, Rafa Climent, respondió al PP que la industria automovilística afronta un cambio estructural por la irrupción del motor eléctrico, con lo que «no hay duda de que el sector camina hacia la descarbonización». «Tenemos que trabajar por convertir ese cambio en una oportunidad para la capacidad productiva», aseveró. Climent reivindica que el Botànic lleva destinados desde 2015 118 millones al automóvil, 68 de ellos en ayudas a Ford, con otros 15,4 para el sector en el presupuesto de 2020. Esto supone dos veces más de lo que destinaba el PP, señaló.