Las pernoctaciones en alojamientos turísticos extrahoteleros cayeron un 96,8% en mayo respecto al mismo mes de 2019, después de que en abril se registraran ceros en todos los componentes por el estado de alarma para hacer frente al coronavirus.

Desde el 11 de mayo se pudieron abrir al público, con restricciones, los hoteles y alojamientos turísticos a medida que los distintos territorios alcanzaban la fase uno del plan para la transición hacia una nueva normalidad.

Pero en mayo solo abrieron un 11% (19.647) de los casi 178.765 establecimientos extrahoteleros -apartamentos turísticos, cámpines, alojamientos de turismo rural y albergues turísticos- existentes en España, un 88,1% menos que en el mismo mes de 2019.

Según la Encuesta de Ocupación en Alojamientos Extrahoteleros difundida este miércoles por el Instituto Nacional de Estadística (INE), en el conjunto de alojamientos turísticos colectivos españoles (sumando los hoteles) las noches consumidas disminuyeron un 98,6% en mayo.

En ese mes apenas se registraron 42.150 viajeros en alguno de los alojamientos extrahoteleros, tan solo el 1,9% de los que se contabilizaron un año antes. Hicieron un total de 295.170 pernoctaciones, el 3,2% de las registradas hace un año.

En el periodo enero-mayo se produjeron 14,3 millones de pernoctaciones en alojamientos turísticos españoles, un 60% menos que en el mismo periodo de 2019.

La comunidad autónoma con más plazas ofertadas en establecimientos extrahoteleros en el mes de inicio de la desescalada es la valenciana, con 38.486 plazas, un 83% menos que en mayo de 2019. Madrid fue la que más viajeros alojó, poco más de 6.300, que consumieron 34.952 noches.

Debido al escaso número de alojamientos abiertos, la información que ha dado este miércoles el INE es más escasa de lo habitual porque no es posible desagregar por provincias ni por puntos turísticos ni ofrecer datos sobre índices de precios.

Atendiendo al país de residencia, las pernoctaciones de los viajeros residentes en España disminuyeron un 94,5% en tasa anual, hasta poco más de 176.000, en tanto que las de no residentes bajaron un 98% (118.800).

Cierre de fronteras

Dado el práctico cierre de fronteras desde mediados de marzo para frenar la pandemia, los viajeros no residentes que se registraron en alojamientos turísticos en mayo son aquellos que bien no salieron de España cuando se prohibieron los viajes o bien entraron en virtud de alguno de los criterios de excepcionalidad establecidos.

Por categorías de establecimientos, las pernoctaciones en apartamentos turísticos se redujeron un 97,4% en mayo respecto al mismo mes del año anterior.

Destaca Canarias, donde en mayo de este año se hicieron el 8,8% del total de pernoctaciones (con una caída del 99,4% sobre el año anterior). En mayo de 2019, Canarias absorbía el 35,2% de todas las pernoctaciones en apartamentos.

En cámpines, las pernoctaciones registraron un descenso del 95,8% sobre mayo del año pasado. En mayo apenas se ocuparon el 27,1% de las parcelas ofertadas, un 18,5% menos que en ese mes del año anterior.

En alojamientos de turismo rural la caída de noches consumidas fue del 95,7% y las plazas ocupadas apenas representaron un 6,3% de las disponibles. El grado de ocupación en fin de semana se sitúa en el 7,8%, el 72,6% menos que hace un año.

Las pernoctaciones en albergues bajaron el 96,9% y se ocuparon el 9,9% de las plazas, el 67% menos que en mayo de 2019. El grado de ocupación en fin de semana solo alcanza el 7%.