Los españoles gastaron un 4,5 % más en julio en la cesta de la compra, lo que supone un punto de inflexión tras cuatro meses en los que se vio impactada por los efectos del coronavirus, regresando a crecimientos previos al inicio de la pandemia, según los datos ofrecidos por la consultora Nielsen.

En concreto, el informe muestra que la estabilidad llega de la mano de los productos envasados, que crecieron un 3 % en las dos últimas semanas de julio, mientras que los frescos mostraron una tendencia también descendente y, después de crecer en torno al 5%, en la última semana (del 27 de julio al 2 de agosto) bajó hasta el 4,4%.

De esta forma, la gran mayoría de categorías de frescos, en tanto carne, verdura o pescado no superaron en ningún caso el 3% de subida, siendo solo la fruta, con un 16%, la que se mantiene en el doble dígito acostumbrado desde que empezó la pandemia del coronavirus.

La consultora vaticina que llega un nueva etapa en el consumo de los españoles que estará marcada por las nuevas condiciones económicas que provocarán un reajuste múltiple en el comportamiento del consumidor.

El estudio muestra que a la hora de qué comprar el consumidor ha introducido nuevas necesidades básicas relacionadas con la protección personal. De hecho, la parafarmacia de gran consumo, que incluye las mascarillas, es la categoría que más crece actualmente con un incremento del 265 % en la última semana de julio, erigiéndose de ese modo en un nuevo básico para el consumidor.

Sin embargo, el informe advierte de que en aquellos hogares con más restricciones se evaluarán ahora mejor y con más cuidado qué artículos formarán parte de su cesta por sus mayores limitaciones económicas.