Compartir vivienda como alternativa

r. f. | valència

La crisis económica generada por la pandemia ha disparado el alquiler de pisos compartidos, según el Colegio Oficial de Agentes de la Propiedad de Valencia. Trabajadores que no pueden hacer frente al alquiler de un piso tras la reducción de ingresos por un ERTE se están viendo obligados a trasladarse a una vivienda compartida. Las inmobiliarias están recibiendo incluso peticiones de familias que se quieren instalar en una habitación. La capital del Túria tiene actualmente una oferta de 2.473 habitaciones con precios que van desde los 195 euros a los 600 euros. Las inmobiliarias explican que el coste de una habitación ronda de media los 300 euros frente a los 800 euros que vale un piso de 100 metros cuadrados. Este tipo de habitaciones los alquilan normalmente estudiantes e inmigrantes que acaban de llegar a València y que en cuanto pueden se cambian a un piso completo para tener independencia.

Suscríbete para seguir leyendo

Tracking Pixel Contents