La planta inmobiliaria de la Comunitat Valenciana acumula años. En la última década se ha construído solo el 3,5 % de todos los inmuebles que hay en la autonomía, según el último número de las «Fitxes municipals», correspondiente a 2019, que ayer publicó la Generalitat. Dicho porcentaje comprende el período iniciado en 2010, es decir, la decada qu4e comenzó con la Gran Recesión provocada en buena medida por el exceso de ladrillo de principios de siglo. De hecho, en los diez años anteriores, o sea, entre 2000 y 2009, es cuando se concentra el mayor volumen de construcción, con un 28,2 % del total. El 7,3 % de las edificaciones son anteriores a 1950. El segundo grupo más numeroso es el de la década de 1970, que acapara el 16,4 %.
Al cierre de 2019, el número de inmuebles urbanos de la Comunitat Valenciana rozaba los cinco millones. De ellos, el 64,4 %, es decir dos de cada tres eran viviendas de particulares. A continuación, con un 24,5 %, aparecen los almacenes y los aparcamientos. El suelo vacante ocupa el 4 % del total. Los inmuebles de uso comercial se quedan en el 3,4 % y los de uso industrial, en el 3,1 %. Las oficinas representan solo el 0,6 %, las áreas deportivas el 0,2 % y los edificios de sanidad y beneficiencia, el 0,1 %, el mismo porcentaje de los destinados a actividades culturales. El ocio y la hostelería llega al 0,3 %. El documento de la Generalita detalla también cuál era la oferta turística de la autonomía en 2019, antes de que la expansión del coronavirus pusiera en jaque, como ha hecho este año, a este sector. Al cierre del pasado ejercicio, había en la Comunitat Valenciana 80.643 apartamentos, con casi 400.000 plazas. Los hoteles eran 799, con 128.941 plazas, mientras que los hostales se quedaron en 216 y 6.836, respectivamente.
En la autonomía había al finalizar 2019 1.039 casas rurales que podían alojar a 8.188 personas. Otros tipos de establecimientos son los 131 campings (71.745 plazas), los 65 albergues (3.441) y las 273 pensiones (5.485). Por otro lado, había en la autonomía 14.824 restaurantes a cuyas meses se podían sentar 858.275 comensales. Hablando de comida, casi la mitad de la superficie de cultivo de la Comunitat Valenciana corresponde a árboles frutales. En concreto, el 29,1 % son cítricos y un 27,2 % al resto, entre los que destaca el caqui, el ciruelo o el melocotón. El olivar ocupa la tercera posición con un 17,1% de la superficie, seguida por la viña con el 11,8 %. Los cereales van a continuación con un 7,6 % y luego, las hortalizas, con un 4,1 %. Viveros, tubérculos y cultivos forrajeros van después, en los tres casos con un 0,6 % del total. Las flores y plantas ornamentales suponen el 0,4 %, los cultivos industriales, el 0,3 % y las leguminosas, el 0,2 %. Por otro lado, la mitad de los turismos en la Comunitat Valenciana (1,3 de 2,6 millones) funcionan con diésel . Solo 1.979 eran eléctricos.
