SP-Berner, empresa dedicada a la fabricación de plásticos industriales y para el consumidor, proveedora de Mercadona, cerró el ejercicio de 2019 con un volumen de negocio de 153,6 millones de euros, lo que supone una reducción del 3% respecto a la cifra del pasado ejercicio. La compañía reconoce que un único cliente en España «ha focalizado esfuerzos en sus controles de stock y su política de abastecimiento y ha demorado los pedidos inicialmente estimados». Con todo, en el mercado europeo e internacional la mercantil valenciana con plantas en España y China, ha crecido un 8% respecto al ejercicio anterior. De hecho, la firma ha creado una empresa mixta con otra compañía de Israel. Dicha mercantil tiene sede en Francia y su producción va destinada al centro y el norte de Europa. Los resultados positivos antes de impuestos de SP-Berner fueron de 11,4 millones de euros, frente a los 12,5 millones del ejercicio precedente. SP-Berner «ha seguido tomando medidas tendentes al incremento de los ingresos y a la reducción de los gastos, con el fin de mejorar su productividad haciendo frente de la manera más solvente posible a los riesgos e incertidumbres existentes en la situación económica nacional y global», asegura en su informe de gestión. La plantilla media en 2019 fue de 1.077 empleados, lo que ha supuesto una reducción del 4% respecto al volumen de trabajadores medio del ejercicio anterior. Desde el año 2013, SP-Berner ha invertido casi 100 millones de euros para lograr sus objetivos de protección del medio ambiente, de innovación en productos, la generación de marcas propias en mobiliario exterior (Shaf) y el crecimiento internacional. La fábrica con cuartel general en Aldaia fabrica unas mil referencias para 46 países y es proveedor especialista de Mercadona. Se ha fijado como objetivo lograr reciclar 35.000 toneladas de plástico, la misma cantidad de kilos que transforma cada año. Las adquisiciones también han supuesto inversiones importantes para la compañía valenciana durante los últimos años.