Agosto ha dado una tregua al comercio exterior de la Comunitat Valenciana. El repunte del consumo en gran parte de Europa y la recuperación de la actividad económica, en medio de la pandemia de coronavirus, durante el período estival, ha permitido incrementar las exportaciones de la autonomía un 1,7 % frente al mismo mes de 2019, hasta los 1.842,2 millones de euros, según constata el informe mensual de Comercio Exterior (Ministerio de Industria).
En ese tímido proceso de recuperación de la balanza comercial participan los envíos agroalimentarios, pues salvan los muebles en el período acumulado enero-agosto al crecer un 8,4 % por el tirón de las frutas y hortalizas, así como de los cítricos, cuyas ventas se dispararon en la parte final de la campaña naranjera 2019/2020. En el lado contrario del balance acumulado continúa la desaceleración de Ford Almussafes y la industria auxiliar de la automoción, que exportaron un 24,7 % menos, y las manufacturas, que perdieron un 5,4 % de ventas foráneas.
El alza de las exportaciones valencianas en agosto –el primero desde el mes de febrero- contrasta con la caída de más del 9 % en el conjunto de España. Este dato corrobora la tendencia de recuperación observada en el tráfico de mercancías del Puerto de València y de los certificados de origen emitidos por las Cámaras de Comercio de la Comunitat Valenciana. Entre enero y agosto de 2020 las exportaciones alcanzaron los 18.321,3 millones, que representa el 11,1 % del total y supone un descenso del 11,8 % respecto al mismo período del año anterior.
Al igual que en meses anteriores, los productos agroalimentarios mostraron en agosto el comportamiento más dinámico. Sólo los vinos retroceden por las restricciones a la actividad del sector de hostelería y restauración. Por otro lado, destaca el notable incremento de los productos cerámicos. Las exportaciones del automóvil también se recuperan en agosto y registran un aumento del 23%, compensando parcialmente la caída de pedidos de meses anteriores. Además, se moderan las caídas de manufacturas de consumo (tras varios meses de tasas negativas elevadas) como las de calzado, cuero, lámparas, juguetes, cosmética y muebles.
Respecto a las importaciones, en agosto alcanzaron los 1.774 millones de euros en la Comunitat Valenciana (el 9,1 % del total), lo que supone un descenso del 7,5 % interanual, mientras que entre enero y agosto disminuyeron un 15,4 % interanual, y se situaron en 16.123,3 millones. Con todo, la Comunitat Valenciana tiene un elevado superávit comercial, de tan solo de 68,2 millones de euros en agosto, pero que en el acumulado de todo el ejercicio sube a 2.198 millones por la contracción de las compras.
Y otro problema. El Brexit impacta de lleno en el balance exterior. Hasta agosto las ventas de las empresas valencianas cayeron un 27,4 % al situarse en 1.242,2 millones de euros. Por destinos, las exportaciones de la Comunitat Valenciana dirigidas a la UE acapararon el 58,1% del total
El conseller de Economía, Rafael Climent, comentó ayer que el sector exterior valenciano «se encuentra en un momento muy complejo a nivel internacional, marcado por la incidencia de la pandemia en todos los países del mundo». Por eso, instó a las empresas a «diversificar mercados».
