El hidrógeno ‘verde’ está llamado a sustituir a los derivados del petróleo y al gas natural como fuente de energía para el transporte pesado y sectores con un gran consumo como la cerámica, la industria química o las refinerías.El hidrógeno es un gas que lleva años utilizándose, pero la clave del nuevo combustible es el calificativo ‘verde’ que identifica que se produce con energías renovables. La Unión Europea apuesta por el desarrollo del nuevo combustible dentro de su estrategia de descarbonización de la economía. La idea es producir el hidrógeno de manera limpia a partir de agua y mediante procedimientos de electrólisis alimentados por energía generada en plantas fotovoltaicas (en el caso de la Comunitat Valenciana) y de aerogeneradores eólicos marinos. En ese contexto, el Consell ha lanzado un plan valenciano de hidrógeno ‘verde’ que conlleva una inversión de 475 millones de euros en proyectos liderados por 17 empresas punteras como Stadler (que trabaja en el desarrollo de locomotoras impulsadas por este gas) o Baleària.
Marcos J. Lacruz, presidente de la patronal valenciana de energías renovables (Avaesen), incide en la importancia de la energía fotovoltaica en el proceso de producción del hidrógeno ‘verde’. El sistema se llama hidrólisis y consiste en separar con electricidad los átomos que componen las moléculas del agua: el hidrógeno y el oxígeno. «Por cada átomo de oxígeno se liberan dos de hidrógeno (H2O) ¿Cómo se rompe la molécula?, con corriente eléctrica.El oxígeno se libera y queda el hidrógeno, que es un gas.El proceso convierte el gas del hidrógeno en liquido por lo que es muy manejable», explica Marcos J. Lacruz. El inconveniente es que la hidrólisis necesita mucha energía, pero gracias a las renovables el coste de producción cae.
El presidente de la patronal de energías renovables incide en que la producción de hidrógeno ‘verde’ permitirá dar salida al excedente de la generación de electricidad de origen fotovoltaico y evitará que se pierda. «La ventaja es que el hidrógeno se puede almacenar en baterías. El sistema es completamente limpio porque las únicas emisiones de los motores de hidrógenos son gotas de agua. Por eso es muy importante esta tecnología ya que optimiza la producción de energía renovable y no emite sustancias contaminantes», apunta Lacruz.
La C. Valenciana ha sido seleccionada por los principales productores de energía como punto de referencia en la futura red europea de hidrógeno ‘verde’. Las gasistas quieren reconvertir las infraestructuras dedicadas al gas natural para usarlas con hidrógeno. Entre las infraestructuras a reutilizar destacan los tanques de almacenamiento de la planta de regasificación de Sagunt. La planta conllevó una inversión de quinientos millones de euros por la infrautilización de las plantas industriales de cogeneración (que queman gas natural para producir energía).
«No se debe mezclar con algún tipo de gas»
Marcos J. Lacruz insiste en la importancia de que la producción de hidrógeno sea 100 % renovable. «Hay que diferenciar el hidrógeno de origen renovable del que se mezcla con algún tipo de gas.Es importante que la apuesta sea por hidrógeno producido con energía procedente de plantas fotovoltaicas. No se debe mezclar con algún tipo de gas, que es lo que buscan las gasistas. Eso es hidrógeno ‘azul’ y tiene mezcla de gas natural. Es importante que la nueva red de distribución sea para hidrógeno ‘verde’. Es un hidrógeno que cuando combustiona solo emite vapor de agua», apunta el presidente de la patronal de energías renovables. La apuesta de Bruselas y de la Generalitat Valenciana es el hidrógeno ‘verde’. Para hacer realidad el plan valenciano se han aliado las patronales azulejeras y cerámica (Ascer y Anfecc), las principales empresas energéticas(Enagás, Naturgy e Iberdrola), Grupo Gimeno,Etra I+D,Smart Energy, Ampere, BP, Ube, Baleària,Stadler, Vectalia y Aerocas (aeropuerto de Castelló).
Regasificadora de gas natural en Sagunt, elemento clave para el desarrollo del hidrógeno ‘verde’ en la C. Valenciana.
