La Comisión Europea está dispuesta a revisar el acuerdo comercial con Sudáfrica y, para ello, ha iniciado ya una ronda de contactos con representantes del Europarlamento y de organizaciones agrarias para que participen en el proceso de evaluación de dicho pacto, que toca revisar el próximo mes de octubre después de firmarse hace cinco años y wque tanto perjudica los intereses del sector naranjero de la Comunitat Valenciana. La idea es que presenten «las propuestas de mejora que consideren oportunas». Así lo reconocieron ayer una decena de funcionarios del Ejecutivo de Bruselas de las direcciones generales de Comercio, Seguridad y Salud Alimentaria y Agricultura tras la reunión mantenida con el secretario autonómico de la conselleria, Roger Llanes, la eurodiputada socialista Inmaculada Rodríguez-Piñero, así como con el secretario general de la Unió de Llauradors, Carles Peris.
El pacto comercial sellado hace un lustro perjudica seriamente el negocio del sector citrícola de la Comunitat Valenciana. Prueba de ello es que los puertos de la Unión Europea recibieron el año pasado alrededor de 500.000 toneladas de naranjas y 180.000 de mandarinas, lo que supone un incremento de la exportación sudafricana a Europa del 29% en el caso de las naranjas. Con todo, son reiteradas la denuncias desde la C. Valenciana para que la UE adopte medidas que eviten la entrada de plagas y que hundan el arranque de los primeros compases de la campaña nacional.
«La reunión de trabajo ha sido un éxito porque los representantes de la Comisión Europea han podido conocer de primera mano la situación de la citricultura valenciana y el impacto que está teniendo en la misma el acuerdo comercial con Sudáfrica», asegura la eurodiputada socialista. Además, tanto la Unió como la Conselleria de Agricultura han podido recibir importantes comentarios de los representantes de la Comisión de cara a la evaluación del acuerdo comercial de la UE para el Desarrollo del África Meridional. La Unió y la Generalitat han trabajado intensamente para proporcionar a quienes toman las decisiones en Bruselas, los datos necesarios sobre los problemas que existen con la competencia de los cítricos sudafricanos. Según Peris, por cada millón de euros que se invierte en prevención de plagas se ahorra un coste público por valor de 100 millones de euros.
La reunión también ha sido muy positiva porque desde la Comisión Europea han explicado que las elementos que se han discutido, como por ejemplo transparencia de mercado y salud vegetal, son importantes en el debate sobre la puesta en marcha del Pacto Verde, la Estrategia de la Granja a la Mesa o la reforma de la PAC.
La dirección general de Salud y Seguridad Alimentaria decidió recientemente tomar cartas en el asunto de las inspecciones de los cítricos en origen importados desde países como Sudáfrica o Argentina para evitar que sean desembarcados en puertos del viejo continente sin cumplir los requisitos fitosanitarios y con posibles plagas vegetales. Bruselas ordena así que a partir de 2021 se realicen esos controles sobre las frutas en los países de procedencia, lo que no ocurría desde hacía cinco años.
