El grupo industrial valenciano Etra lidera un consorcio europeo que planea la construcción de una megaplanta de hidrógeno verde en Castelló para suministrar combustible a las empresas cerámicas. Las azulejeras han apostado por el hidrógeno verde (que se produce con electricidad generada en plantas renovables) como alternativa al gas natural. En el proyecto se ha implicado la multinacional energética italiana Enel y cuenta con el apoyo de la Generalitat Valenciana. El jefe del Consell, Ximo Puig, destacó ayer que la megaplanta es «una gran noticia» ya que implica «puestos de trabajo y dinamismo económico». El consorcio incluye importantes actores industriales, centros de investigación, instituciones públicas y una veintena de empresas azulejeras que consumirán el hidrógeno verde. El proyecto conlleva una inversión de 100 millones de euros.

La iniciativa se denomina Orange.Bat. El grupo ha pedido apoyo financiero a la Unión Europea para que la planta (que incluye un innovador electrolizador de 100 MW) esté operativa en 2024. El consorcio está compuesto por cuarenta organizaciones de España, Alemania, Suiza, Italia yGrecia. Enel Green Power contribuye a Orange.Bat en la etapa de producción de hidrógeno renovable del proyecto. La energética italiana será (a través de su filial española Enel Green Power España) copropietaria de la planta junto a a la compañía Smart-Energy Group y suministrará electricidad renovable.

El proyecto está impulsado por 26 empresas cerámicas de Castelló (que necesitan una alternativa barata y limpia al gas natural) y las patronales azulejeras y de fritas (componente principal de casi todos los esmaltes cerámicos) Ascer yAnfecc. El consorcio ha acordado que la planta prevista se desplegará cerca de la ciudad Castelló, en uno de los clústeres industriales cerámicos más importantes de Europa ya que concentra el 95 % de la industria cerámica de España y es responsable del 33 % de las emisiones de CO2 de la Comunitat Valenciana. El consorcio Orange.Bat cubre toda la cadena de valor, desde la generación y el almacenamiento de hidrógeno verde hasta su distribución y consumo.

Con todo ello, se espera que Orange.Bat favorezca la explotación del hidrógeno verde de cara al cumplimiento de los objetivos europeos de descarbonización, a la vez que redunda en la creación de puestos de trabajo industriales de alto valor añadido.

Además de actuar como coordinador de este proyecto, Etra contribuirá a Orange.Bat mediante el desarrollo de una plataforma que gestionará y optimizará -aplicando técnicas de inteligencia artificial- la operación y mantenimiento de todos los equipos y sistemas del proyecto, desde la generación hasta el consumo del hidrógeno verde. Además, Cobra (la filial industrial de ACS) participará en el diseño, construcción y puesta en marcha de la planta, incluyendo el sistema de distribución de hidrógeno verde y otros elementos del electrolizador (que es donde se produce la electrólisis que permite convertir el agua -h2O- en hidrógeno y oxígeno).

La directora de la unidad de negocio de Hidrógeno de Enel Green Power, Paola Brunetto, destacó que para el grupo el hidrógeno verde «es la única solución verdaderamente sostenible que puede apoyar la descarbonización de sectores con emisiones difíciles de reducir, donde la electrificación de los usos finales no es una solución fácil». Por su parte, Etra defiende que «el hidrógeno verde se convertirá en una herramienta muy poderosa para que Europa logre sus ambiciosos objetivos de descarbonización», asegura el director de Tecnología e Innovación de Etra y coordinador de Orange.Bat, Antonio Marqués Moreno.

Como proyecto también de economía circular, Orange.Bat valorizará los subproductos del electrolizador consumidos o generados en el proceso industrial. Además de remplazar el consumo de gas natural por hidrógeno verde evitando las emisiones de CO2, el oxígeno generado se utilizará para mejorar el proceso de horneado, y el calor producido se empleará para calefacción industrial y residencial.

Despliegue del hidrógeno

La Generalitat Valenciana ha apostado por el despliegue del hidrógeno verde como alternativa a los combustibles contaminantes. De hecho, «el Ministerio reconoce que la iniciativa en la Comunitat Valenciana es de las pioneras en España en esta nueva manera de entender la energía», resaltó ayer el jefe del Consell. En este sentido, Puig destacó el «impulso a la descarbonización» y «la ayuda al sector cerámico que es fundamental para la economía de Castelló y para la economía de la Comunitat».

Asimismo, el president de la Generalitat subrayó «el alineamiento que hay de esta gran inversión de más de 100 millones de euros que va a significar puestos de trabajo y dinamismo económico para Castelló, ese dinamismo real que existe con la estrategia valenciana para la recuperación».