Todos los vehículos que fabrique Ford a partir de 2030 serán 100 % eléctricos. La compañía estadounidense anunció ayer su hoja de ruta hacia las cero emisiones en la próxima década, una estrategia que por lo revelado ayer pivotará sobre la planta que la marca del óvalo tiene en Colonia (Alemania), en la que invertirá 828 millones de euros para que comande su adaptación hacia esos modelos electrificados.

Ford Europa lo comunicó ayer a través de una nota de prensa, en la que no mencionó ninguna inversión para la factoría de Almussafes —tampoco para ninguna otra en el continente—. La planta valenciana inicia la fabricación del motor híbrido del Kuga el próximo abril, y pese a no tener noticias de los planes de la dirección respecto a su futuro, la lectura que llegaba desde la fábrica de Almussafes era favorable.

El presidente del comité de empresa, Carlos Faubel, entiende que la apuesta por el eléctrico podría favorecer a València, aunque lamentó seguir sin conocer los planes a largo plazo de Ford.

El fin de los modelos a combustión será progresivo. El objetivo de la compañía es que a mitad de 2026 todos los utilitarios sean de cero emisiones (híbrido enchufable o 100 % eléctrico) y para 2030 alcanzar la totalidad de eléctricos. «Los consumidores quieren cada vez más que nos volvamos eléctricos», dijo el presidente de Ford Europa, Stuart Rowley.

El año pasado, Ford ocupó el noveno lugar en ventas en Europa, perdiendo dos puestos respecto a 2019 según la Asociación Europea de Fabricantes. Además, en los últimos dos años ha cerrado cinco fábricas y eliminado 10.000 empleos en el continente.